Fabrica juguetes de madera que desarrollan habilidades en los niños
El juego es una actividad central en la vida de las niñas y niños, ellos imitan lo que ven alrededor suyo y lo recrean, así sus cualidades particulares se ponen de manifiesto y va de la mano con la dinámica en el hogar, que es su entorno primario; y es en base a estos conceptos que Leonela Grasmick comenzó a desarrollar su emprendimiento de juguetes en madera inspirados en las pedagogías Waldorf y Montessori, al que llamó Aleonel.
¿Es un desafío llevar adelante este emprendimiento en un mercado donde la tecnología está a pleno?
La idea es que puedan encontrar en estos juguetes algo que los motive y les haga volar su imaginación explorando sus capacidades y habilidades potenciales. En sí, son juguetes que tienen su utilidad, y la que a su vez le da el chico al tener la posibilidad de desestructurarse volviendo al juego natural, sin pantalla y distracción tecnológica.
¿Cómo surge la idea del emprendimiento?
En momentos de pandemia, donde tuve que dejar mi trabajo en relación de dependencia, y la verdad que cuando estás acostumbrada a trabajar comenzas a buscar el que poder hacer; y hacía tiempo que venía con la idea de hacer algo como esto. Así que comencé con el proyecto como un pasatiempo haciendo pedidos a amigos, conocidos, que son los que primero confían en uno, y poco a poco se comenzó a correr la voz y la gente comenzó a ver la propuesta y les gustó. Eso conllevó a que de dos cosas que estaba haciendo tuviera que comenzar a crear nuevos juguetes que permitan tener una propuesta más amplia.
¿Los juguetes son más de entretenimiento?
Son juguetes desestructurados, para juego mucho juego simbólico que a los chicos les ayuda mucho en interactuar con lo que ven en la vida cotidiana, no tienen instrucciones ni sonidos y tienen posibilidades de creación ilimitadas según la creatividad de cada pequeño. Además, están los juegos clásicos, como el yenga, el tatetí, el abecedario, que son juegos que a la vez les permite ir aprendiendo.
¿Es difícil ser emprendedor?
Si uno quiere vivir de esto, es todo un proceso largo; al menos en este rubro. Para buscar un balance en lo que es precio calidad, es difícil en tiempos de inflación; más considerando que para mí prima la calidad del producto, sobre todo. Y en base a esa calidad, tratar de ofrecerle a la gente el mejor precio posible. Y siempre terminas en un cuello de botella cuando el paso para crecer es incorporar nuevas herramientas o alguien más para trabajar, pensando en que tenes que producir más pero que además no se pierda la esencia del juguete artesanal que es personalizado. Ese es el plus que llevan estos juguetes, porque trato de que cada persona pueda tener un juguete único, a su gusto. Creo que cuando uno crece, que es la idea que tengo, la de poder seguir creciendo; se debe saber manejar la producción para que ese diferencial que tiene el juguete artesanal se vaya perdiendo.
Datos
En Instagram: @alenoel2020