Salud
Celiaquía: consejos para comer sin gluten en un restaurant
Salud.- La celiaquía, también conocida como enfermedad celíaca es ni más ni menos que la intolerancia permanente que tienen algunas personas al gluten, un conjunto de proteínas contenidas en la harina de diversos cereales, fundamentalmente el trigo, pero también el centeno, la cebada, la avena y el triticale.
Por este motivo las personas que la padecen tienen que tener cuidado con la ingesta de los alimentos, en especial cuando comen fuera de sus casas ya que la exposición a mínimas cantidades de gluten es suficiente para dañar la mucosa intestinal y mantener la activación inmunológica.
Las personas enfermas de celiaquía pueden comer en restaurantes, pero atendiendo a los siguientes consejos:
#1. Identificar y seleccionar establecimientos con inquietud y formación para atender correctamente a los celíacos y a las personas sensibles al gluten.
#2. Programar la comida con antelación y hablar previamente con el responsable para asegurarse de que en su establecimiento conocen y aplican las normas a fin de evitar contaminaciones cruzadas.
#3. Elegir platos sencillos, preguntar siempre cualquier duda y dar instrucciones precisas: “Necesito saber si en la plancha se cocinan alimentos con gluten”, “Utilicen una sartén limpia, con aceite limpio de la botella, para freír mis papas”, “Enséñeme por favor el etiquetado del helado”, “¿Este pimentón está certificado sin gluten?”, etc.
#4. Los empleados de los restaurantes deberían saber que siempre que se experimente alguna contaminación en su establecimiento deben ponerlo en conocimiento de su responsable para facilitar la labor mutua y la corrección de errores en el futuro.
A estas recomendaciones básicas, la Asociación Argentina de Celiaquía agrega otras más concretas:
#1. Cuidar que las migas de la panera no caigan en su plato. Si así ocurre solicitar un cambio.
#2. Si la manteca u otros aderezos que normalmente se sirven en los restaurantes no vienen en envase individual y tienen trazas de pan, no consumirlo.
#3. Si uno pide un jugo de frutas, asegurarse que sean de fruta natural, recién exprimida, sin agregados de jugos artificiales.
#4. Siempre es agradable salir a comer fuera de casa. Otras veces es necesario, por motivos de trabajo. Por eso recomendamos identificar y seleccionar previamente restaurantes que tengan un menor riesgo de contaminación cruzada como, por ejemplo, los que ofrecen carnes asadas o a las brasas, pescados a la parrilla, papas cocidas, etc.
#5. No apresurarse a pedir platos que sean potencialmente riesgosos como guisos, salsas, sopas, embutidos, etc.
#6. Al comer postres, seleccionar frutas frescas. También se pueden probar otras opciones como flanes, siempre y cuando se elaboren sólo con leche y huevos.
#7. Si existen dudas acerca de la forma de preparación y de los ingredientes del plato elegido, preguntar cuantas veces sea necesario o directamente no consumirlo.