Entre Diamante y Victoria
Una vida comprometida con la ruralidad
Marta Gieco de Calderón fue homenajeada por su participación desde hace casi dos décadas en la Sociedad Rural de Victoria.
Victoria.- Nacida en una primavera campestre de Costa Grande en suelo diamantino, Marta Gieco supo transitar la primera etapa de su vida en esas tierras atravesadas y definidas por la producción; marco geográfico aquel, que hizo espejo a través del tiempo en su esencia de mujer rural, que vive a suelo y cielo abierto, conociendo de primera mano la siembra y cosecha de nuestra madre tierra.
“De chicas íbamos con mis hermanas a la escuela primaria de a caballo, teníamos la escuela cerca, pero todo el tiempo hacíamos muchos trabajos de campo”, cuenta a Paralelo32, comentando luego que, ya siendo una adolescente, una tía la llevó a Rosario donde estuvo un tiempo viviendo, para luego volver a la ciudad Blanca y trabajar en la entonces Cooperativa Federal Agrícola Ganadera de Diamante limitada, hoy ya fusionada con LAR La Agrícola Regional Cooperativa Limitada, Agropecuaria, de Consumo y de Servicios públicos.
Aquellos, fueron los años previos a lo que sería su destino en Las Siete Colinas, más exactamente en Pajonal, junto a su marido el reconocido y recordado productor rural Don Ángel Calderón, quien falleciera a fines del año pasado, llevándose con su partida el festejo de las Bodas de Oro y con quien construyó su más férreo proyecto de vida, una familia.
Compromiso con el sector rural
“A mí me gusta el campo, estoy allí, es como que acá en la ciudad nada tengo que hacer, mi trabajo está allá. Con mi esposo trabajábamos siempre juntos, hacíamos las tareas a la par; sobre todo mientras nuestros hijos se fueron a estudiar, hasta que se recibieron, vinieron y ahora son ellos los que llevan adelante todas las tareas”.
De hecho, su gusto por las actividades rurales la han llevado a convertirse en una valiosa integrante y referente femenina de las tareas intra institucionales de Sociedad Rural Victoria, ocupando un lugar de responsabilidad en las diversas comisiones que se han gestado con el correr de los años.
Y fue por eso que este domingo 6 de octubre, en el marco del Acto de Apertura e Inauguración de la 102° Expo Rural Victoria, Marta recibiera un reconocimiento a su labor y tarea, siendo los encargados de entregarle un presente el presidente de SRV, su presidente Eduardo Grimaux y su esposa Bernadette Álvarez Eguileta; efectivizando esto previa lectura de las siguientes palabras:
“«Aprovechamos esta edición 2024 de la Expo Victoria, para reconocer en esta mujer a cada una de las que con su entrega y protagonismo han contribuido a que la familia rural sea una realidad. Ya sea participando en decisiones, educando, trabajando a la par de cualquier hombre, la encontramos sosteniendo y apuntalando situaciones cuando se necesita una mirada superadora de las diferencias. Esa mujer, que se reinventa cada día por su decidido compromiso con el hacer de una región, desde sus valores y principios, no puede estar ajena a esta fiesta del campo y la ciudad que celebramos hoy».
”Queremos armar el Ateneo en la Rural”
Marta se mostró agradecida durante su entrevista con Paralelo 32 y aludió a ese momento: “estoy muy agradecida, me sentí muy feliz, no sé lo que sentía en ese momento porque fue tan sorpresivo. Aparte de estar con amigos, estaba toda mi familia, hijos, nietos, nuera, hermana, familiares, todos familiares muy cercanos; para mi fue todo muy emotivo”, recordó, agregando que a partir de ahora su objetivo es entusiasmar y convocar a los jóvenes, para poder conformar así el Ateneo de la SRV.
“Ya este año trabajaron hijos de socios o de directivos, los estamos entusiasmando para que armen el Ateneo de la Rural, es importante que haya sangre nueva, digamos, que se comprometan en seguir con todo ésto”, indicó, haciendo hincapié en su enfoque en apuntalar a los jóvenes que quieran compremeterse y participar activamente.
Al finalizar, subrayó el beneplácito que le embarga al portar el título de ser la primera mujer que participó de la comisión de la entidad madre del campo a nivel local; además de acentuar y agradecer la concurrencia de las miles de personas que recorrieron el predio del primer cuartel de nuestra ciudad.
Marta, una mujer de fuste, definida por la lealtad, firmeza y accionar de la mujer rural, pero sostenida y acompañada por la presencia de seis hombres, sus hijos, Facundo y Juan Cruz, sus nietos, los niños Felipe, Juan Bautista, Agustín y Octavio…y “un Ángel” que la guía desde otra dimensión