Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos
Celebración ecuménica. Mañana miércoles 17 de mayo habrá una misa en la iglesia de la Parroquia Ntra. Sra. del Rosario con la participación de varias iglesias evangélicas y ambas parroquias católicas • Es una jornada que impulsan a nivel mundial el Vaticano y el Consejo Mundial de Iglesias desde hace décadas.
Crespo.- Mañana miércoles 17 de mayo en la Parroquia Ntra. Sra. del Rosario a las 20 habrá una misa ecuménica con la participación de las parroquias católicas y varias congregaciones evangélicas locales. El evento se desarrolla en un momento nacional y mundial de crisis del ecumenismo, movimiento que busca consolidar los principios de unidad entre las distintas iglesias cristianas, por sobre sus diferencias. Un texto del Evangelio según Juan (Jn 17; 21) fue promovido como lema de este encuentro: “Te pido que todos sean uno. Padre, así como tú estás en mí y yo en tí, permite que ellos también estén en nosotros para que el mundo crea que tú me has enviado”.
Muro y cruz
En diálogo con Paralelo 32, el pastor Darío Dorsch, de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata, comentó: “Están las dos parroquias católicas, IERP, Comunidad Cristiana, Iglesia Evangélica Congregacional, Iglesia Luterana ‘San Pablo’ y el Templo ‘Buenas Nuevas’ del pastor Roque Allegrini”. Señaló que otras iglesias evangélicas no participan en desacuerdo con aspectos doctrinarios de la convocatoria.
Al describir la celebración que se está preparando, Dorsch señaló: “Va a ser muy simbólico y se tomará la escenografía montada este año por las iglesias alemanas en esta celebración. Mientras se leen los textos bíblicos, miembros de las distintas iglesias van a llevar elementos que semejarán ladrillos y van a armar un muro, que simboliza las diferencias entre las iglesias. Después se lee otro texto y ese mismo muro va ser transformado en una cruz, como símbolo común que une a todos los cristianos”.
Organización mundial
Dorsch comentó que el evento ecuménico es organizado conjuntamente por el Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos y la Comisión Fe y Constitución del Consejo Mundial de Iglesias. En el hemisferio norte la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos se celebra tradicionalmente del 18 al 25 de enero. Estas fechas fueron propuestas en 1908 por Paul Watson para cubrir el periodo entre la fiesta de san Pedro y la de san Pablo, que tienen un hondo significado. En el hemisferio sur donde enero es tiempo de vacaciones de verano, las Iglesias frecuentemente adoptan otras fechas para celebrar la Semana de Oración, por ejemplo en torno a Pentecostés (sugerido por el movimiento Fe y Constitución en 1926), que representa también otra fecha significativa para la unidad de la Iglesia. Teniendo presente esta exigencia de flexibilidad, las congregaciones participantes invitan a utilizar estos materiales a lo largo de todo el año para expresar el grado de comunión que las Iglesias han alcanzado.
Aniversario de la Reforma Protestante
Dorsch comentó que en el contexto del aniversario de la Reforma Protestante (El 31 de octubre de 1517, Martín Lutero dio a conocer sus 95 tesis que lo diferenciaron de la Iglesia Romana de entonces, N. de R.), el Consejo de las Iglesias de Alemania (ACK), invitado por el Consejo Mundial de las Iglesias, asumió la tarea de elaborar los materiales para la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos de este año. Un comité compuesto por diez miembros que representaban distintas Iglesias se reunió tres veces en 2014 y 2015 para redactar los textos requeridos. Se puso un énfasis especial en la preparación de la celebración ecuménica de la Semana. Los materiales deberían servir para la Semana de Oración y al mismo tiempo para conmemorar la Reforma luterana.
El tema por la Unidad de los Cristianos
El entrevistado destacó que la Exhortación Apostólica del papa Francisco de 2013 Evangelii Gaudium (“La alegría del Evangelio”) aportó el tema de este año, al utilizar la cita: “El amor de Cristo nos apremia” (número 9). Con el texto bíblico (2 Co 5, 14), tomado en el contexto de todo el quinto capítulo de la segunda Carta a los Corintios, el comité alemán formuló el tema para la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos 2017.
Ecumenismo y crisis
El pastor Dorsch recordó que en 1908 se inició la liturgia por la unidad, a partir de una iniciativa del Vaticano. Luego, cuando se creó en la década de 1930 el Consejo Mundial de Iglesias, institución que nuclea a numerosas iglesias reformadas, ambas instituciones, el Consejo y el Vaticano, fueron coordinando los procesos de ecumenismo, que a partir del Concilio Vaticano II tuvieron mayor impulso.. En la década del noventa llegó a la Argentina y desde entonces, en forma lenta se fue extendiendo por las parroquias, templos, iglesias y congregaciones que están de acuerdo en desarrollar proyectos de unidad y ecumenismo. “En todo el mundo se utilizan estos espacios de acercamiento; me parece que a nivel mundial el ecumenismo está en crisis, y ¿dónde está el futuro de la unidad? En las bases, en las congregaciones. Si nosotros no hacemos nada, arriba pueden sacar toda clase de documentos, pero no van a tener futuro”, comentó.
– ¿Por qué cree que el ecumenismo está en crisis?
— Uno de los grandes referentes nuestros fue el ISEDET (Instituto Superior Evangélico de Estudios Teológicos), pero se cayó, se cerró, era un proyecto enorme con varias iglesias reformadas y protestantes participando. La Editorial Aurora sigue, pero está chiquitito su desarrollo porque el gran proyecto que la había gestado se cayó. Hoy hay como un volver a las iglesias individuales, contra el ecumenismo.
El pastor Dorsch señaló la importancia de revitalizar el ecumenismo buscando entre todas las denominaciones cristianas los elementos teológicos y pastorales que las unen, para mejorar el diálogo y la comprensión en torno a los temas que dividen.
Texto bíblico del Encuentro
“En todo caso, es el amor de Cristo el que nos apremia, al pensar que, si uno murió por todos, todos en cierto modo han muerto. Cristo, en efecto, murió por todos, para que quienes viven, ya no vivan más para sí mismos, sino para aquel que murió y resucitó por ellos. Así que en adelante a nadie valoramos con criterios humanos. Y si en algún tiempo valoramos a Cristo con esos criterios, ahora ya no. Quien vive en Cristo es una nueva criatura; lo viejo ha pasado y una nueva realidad está presente. Todo se lo debemos a Dios que nos ha puesto en paz con él por medio de Cristo y nos ha confiado la tarea de llevar esa paz a los demás. Porque sin tomar en cuenta los pecados de la humanidad, Dios hizo la paz con el mundo por medio de Cristo y a nosotros nos ha confiado ese mensaje de paz. Somos, pues, embajadores de Cristo y es como si Dios mismo os exhortara sirviéndose de nosotros. En nombre de Cristo os pedimos que hagáis las paces con Dios. Al que no tuvo experiencia de pecado, Dios lo trató por nosotros como al propio pecado, para que, por medio de él, experimentemos nosotros la fuerza salvadora de Dios”. (2 Corintios 5, 14-20)