Se nos nota cuando hablamos

** A menudo las personas delatan su edad con su lenguaje diario, y ni te cuento si para simbolizar recurren a personajes de las historietas, el cine o las novelas de su tiempo. La delación auto infringida inconscientemente sucede, por ejemplo, cuando una persona recuerda una ocasión en que salió con un novio (más de 60 años), con un amigovio (+ 30), o con un chico (sub 25)  Y si dice ‘Bae’, que es una simplificación de baby, algo así como nena o nene en inglés, el que habla es un youtuber sub 18.

** Si oyes a una persona hablar de ‘chusmerío’ y a otra de ‘salseo’, podés tener ahí una brecha de medio siglo, fácil. Es como un #olés a naftalina, versus #te-estás-iniciando-enelFernet. Y si, ¿por qué no ponerlo en estos términos si a los 12 años los babis ya no quieren tomar la Coca sola? Y nosotros no éramos mejores, porque a los 14, no tenés idea las cosas que hacíamos o imaginábamos con la Coca, genia y figura de su director y amante, el cineasta Armando Bo. El que pueda entender que entienda y el que no… es sub 60.

** Como se podrá comprobar, en este segundo párrafo se me notó. La edad se delata siempre en el lenguaje. Nos basta mencionar una historieta, un libro, un actor de cine, para quedar tocando el clarinete al lado de un pizarrón con nuestra edad escrita a gran tamaño con el lomo de la tiza. Hay algunos que son peores. Hombres y mujeres que siguen fascinados con Brigitte Bardót (BB), Gina Lollobrígida, Sophía Loren… y ellas de Cary Grant, Marlon Brando, Paul Newman, Robert Redford… Es una contradicción teñirte el pelo para ocultar las canas y recordar todo el tiempo a esta gente.

Más pistas para detectarlos      

** Hay alguien de la familia que hace morisquetas durante la sobremesa y un mayor que le dice “¿de qué te la das, Balá?, y alguien más que con voz menos cascada le dice ¡te hacés el Topa!  Ahí ya tenés una brecha de 50 años, fácil. Al concierto de voces podrían sumarse los que dicen por ejemplo: “Sos Gardel”, y si doblan el elogio: “sos Gardel y Lepera”, sumales diez años más. Momentos más tarde se despiden y el pariente invitado viajará de regreso; uno le dice “pegame un tubazo cuando llegues”. Es el que quedó pegado al teléfono negro y se está esfumando con él. Otro le dirá simplemente “quedamos”; este quedó pegado a la estupidez y se lo está fumando el exceso de síntesis, consecuencia del celu.

** Con los youtubers no me meto porque no tengo argumentos. No se puede opinar sobre lo que no se comprende. Ellos inventan neologismos deformando palabras del inglés o abreviándolas en siglas. Se manejan con, por ejemplo, LOL, acrónimo de procedencia anglosajona que significa Laughing out loud, Laugh out loud o también Lots of laughs, que traducido al español significa reírse en voz alta o reírse a carcajadas. Y cuando apagan el chat le dicen a la madre: ¡no sabés, me cagué de la risa con lo que…! Son tan hipócritas como sus padres; hacen el esfuerzo de hablar difícil cuando están con la tribu, pero se sienten cómodos hablando fácil en casa. Los del ‘inclusivismo’ son iguales.

** Para decir ¡pero qué me estás contando! ¿Es en serio?, escriben WTF Literalmente significa “¿¡qué carajo?!” y también viene de Sajonia.

Otra de las tantas es AFK: Del inglés away from the keybord (Lejos del teclado). Lo usan para informar desconexión de cualquier dispositivo con Internet. Si avanzás dos pasitos más en el abecedario, quedás en CFK, (Me quieren desenchufar el Keybord)

Los radioaficionados pioneros           

** Se parecen a los radioaficionados, que se entienden con el Código Q, pero esto es distinto. Es gente muy educada, cuando tienen una interferencia dicen “Hay otro QSO 2 kHz abajo que me produce mucho QRM”, jamás van a decir hay otro HDP que mete ruido en la frecuencia.

Tampoco dicen “aguantame un cacho que quiero morfarme un sánguiche”. Para esto dicen gentilmente: “Por favor, quedo QRT 20 minutos”. Es el equivalente del famoso “te llamo en 5” que nos decimos en llamadas telefónicas sin aclarar si serán 5 minutos o 5 horas.

** Cuando van a cortar no te dicen “nos hablamos”, para que pase un año sin hacerlo. Le piden al interlocutor un QRX hasta tal fecha a tal hora, y siempre cumplen. Mi hermano Omar fue radioaficionado (LU9-JAU) y me hizo pensar que si nuestro país estuviera gobernado solo por radioaficionados y bomberos, seríamos Suiza. Pero, con el tiempo aprendí que no importa la profesión del que gobierna; la clave es que no odien, y si lo hacen que no siembren su odio ni lo usen como estrategia de gobierno.

** Esta mención de los Códigos Q de los radioaficionados va en homenaje de todos ellos, que en octubre celebrarán su día. Y sumamos un dato: A finales de 1922 los radioaficionados del Reino Unido comenzaron a ser captados con frecuencia en Norteamérica, y una de sus primeras funciones fue comunicar a los incomunicados, voluntaria y gratuitamente, por vocación. Se cumple un siglo de aquel hito.

Ni Mandrake lo arregla               

** A quien se le notó la edad es a CFK (pongámoslo así porque el nombre completo irrita a unos, que viven a la ofensiva, y pone en guardia a otros que viven a la defensiva). Fue en su discurso desde El Calafate inaugurando algo que esta vez no construyó Báez. Si se nos permite detenernos en detalles menores, diremos que se le notó la edad cuando dijo: ‘Aunque el año que viene gane Mandrake el mago y su amiga Lorna, no va a haber solución para este problema estructural, que lo constituye la economía bimonetaria’.

** Hay una cuestión de fondo que es la economía bimonetaria, a la que ahora se le echan todas las culpas –Macri agradecido– y que existe desde que tenemos uso de razón. Siempre hemos corrido tras el dólar y no por eso el país estuvo peor que ahora. Y la cuestión trivial es que la chica de Mandrake el Mago se llamaba Narda, y no Lorna, algo que no le perdonarían los pocos fans que le van quedando al viejo Mandra, cuya historieta (para unos) o comic (para otros) solo duró tres años como tira, entre 1953 y 1956.

** Y usted preguntará por qué lo trivial y no lo sustancial. Porque lo trivial tiene arreglo. ¿Se entiende? Veamos ahora lo otro: En julio las importaciones representaron uSs 8.000 millones, de los cuales unos 2.000 millones se utilizaron para cubrir la importación de gas. Según estimaciones privadas, un 25% de los 6.000 millones de dólares restantes responde a las mafias, como la sobrefacturación de bienes o el simple fraude a partir de ingresar mercadería «chatarra» o sin valor de reventa. Ahora bien, esta Aduana, que es un colador, una cueva de mafiosos, ¿No está a cargo de los amigos del máximo hijo de la señora?