Se presenta hoy en Crespo
Santiago Benavides: Una voz que trasciende fronteras y géneros musicales
La música de Santiago Benavides desafía cualquier intento de encasillamiento. Su estilo es una fusión rica que abarca desde el folklore hasta el rock pop latinoamericano, pero lo que realmente distingue su obra son las letras cargadas de una profunda cosmovisión cristiana, capaces de tocar el corazón tanto de creyentes como de quienes no lo son.
Desde sus humildes comienzos cantando en los autobuses de Bogotá, hasta su consolidación como un artista reconocido con cinco discos grabados y giras internacionales, Benavides ha demostrado un talento singular para impregnar sus canciones de una espiritualidad auténtica que resuena con la vida cotidiana.
En una entrevista reciente, Santiago compartió detalles sobre su trayectoria musical y su encuentro con la fe que ha moldeado su vida y su arte.
Un llamado divino desde la infancia
Santiago recuerda que su conexión con la música y su relación con Dios comenzaron de manera simultánea. Creció en una familia católica, y durante su primera comunión, una canción marcó su vida: “Habla Señor, que tu siervo escucha”. Esa experiencia sembró en él la idea de un llamado divino, aunque los años por venir le llevarían por caminos inesperados.
La adolescencia de Benavides estuvo marcada por una crisis económica familiar que los llevó de regreso a Colombia después de un tiempo próspero en Venezuela. La situación llevó a sus padres a buscar respuestas espirituales, y encontraron un hogar en una iglesia cristiana. Aunque inicialmente escéptico, Santiago fue testigo del cambio radical en sus padres y, eventualmente, experimentó su propia conversión.
El encuentro entre fe y música
A partir de su decisión de seguir a Cristo, Santiago enfrentó un dilema: amaba la música latinoamericana y la canción protesta, pero creía que la música cristiana debía limitarse al culto dominical. Sin embargo, un evento marcó su perspectiva artística para siempre.
“Un grupo argentino, el Trío Mar del Plata, vino a mi iglesia, y cuando los escuché cantar con folklore y letras poéticas llenas de fe, supe que eso es lo que quería hacer por el resto de mi vida”, narró. Ese momento fue crucial para que Santiago comenzara a desarrollar un estilo musical que honra su fe y conecta con las vivencias humanas de manera única.
Un legado de esperanza y fe
Hoy, la música de Santiago Benavides trasciende fronteras, tanto geográficas como culturales. Sus canciones abordan temas como el amor, la tristeza y la vida, con un enfoque que invita a la reflexión y a la esperanza. Su capacidad para conectar con diversos públicos lo ha convertido en una figura destacada en el panorama musical cristiano y en un puente entre lo espiritual y lo cotidiano.
Santiago Benavides no solo es un músico; es un narrador de historias que, a través de sus melodías, lleva un mensaje que resuena profundamente en el corazón de quienes lo escuchan, independientemente de sus creencias. Se presentará este lunes 27 de enero en el anfiteatro del Parque del Lago en Crespo, a partir de las 20:30 horas.