Novedades económicas y la caída del Imperio Romano
Por el Cdor Fabian Zorzabal.-
Se incrementa el Salario Mínimo: El Ministerio de Trabajo, mediante el dictado de la Res. 4/2020 fijó el SMVyM para todos los trabajadores de una jornada laboral completa en los valores siguientes según fecha de vigencia:
Desde 10/20: $18.900, desde 12/20: $20.587,50, y desde 03/21: $ 21.600.
Medidas para contener el dólar: La Comisión Nacional de Valores, con el dictado de la Res. 862/2020 disminuyó el plazo a 3 días hábiles para realizar la compra-venta de títulos que permiten realizar las operaciones financieras para hacerse con dólares.
¿Aprender del pasado? En el mundo de la Bolsa de Valores, han existido grandes operadores que hicieron mucho dinero. Uno de ellos fue W D Gann. Gann basó su estrategia en observar el pasado y en su creencia de que el comportamiento humano tiende siempre a repetirse, logró llegar a ser un hombre extremadamente rico. Lo más curioso es que sus predicciones no se limitaron al ámbito bursátil, sino que lo hizo en otros temas, siempre vinculados con la repetición de comportamientos.
El fin de un imperio
Es por el comentario del párrafo anterior que traigo una historia. Después de la era dorada del Imperio Romano, éste comenzó lentamente a decaer hasta finalmente desaparecer. Una de las principales crisis que tuvo el imperio fue económica y según algunos historiadores una de las causales del fin. Pues bien, el emperador Diocleciano gobernó entre los años 284 y 305 D.C. Cuando asumió ya todo era un caos y el imperio muy grande. El ejército no tenía demasiadas guerras, la burocracia era grande y la cantidad de personas que dependían del imperio era gigantesca. Además, el emperador deseaba restaurar las grandes obras del pasado. El único problema fue que el imperio ya no crecía, no tenía conquista de territorios y por lo tanto no tenía dinero para su mantenimiento. A fin de solucionar mágicamente el problema, decidió que las monedas, que hasta ese momento tenían el respaldo del material del que estaban hechas, podían construirse de otros materiales más baratos y de esta manera podían hacerse en mucha más cantidad y con eso pagar el enorme gasto público y realizar sus obras de restauración. Fue así como comenzó la devaluación de la moneda del imperio, es decir, comenzó una era de fuerte inflación y los precios de los bienes subían constantemente.
El imperio contraataca
Fue entonces cuando a fin de terminar con “los especuladores”, emite un edicto en el año 301 por el cuál fija el precio máximo de más de 1.000 productos esenciales. Quienes no cumplieran este edicto serían castigados con la muerte. Las consecuencias no se hicieron esperar y fueron desastrosas. Muchos fueron ejecutados, los que decidieron seguir vivos dejaron de producir esos productos, hubo desabastecimiento, el comercio se desplomó, el ejército no cobraba lo suficiente para poder alimentarse, las rutas romanas se descuidaron y aumentó el bandolerismo y la inseguridad. El emperador le echó la culpa de todo a los cristianos y comenzó a perseguirlos ferozmente. La magia había terminado. Afortunadamente luego vendría Constantino I El Grande, quien restauraría el sistema monetario dando más estabilidad. Pero el daño ya estaba hecho.
Por suerte, esto pasó hace más de 1.700 años y la humanidad aprendió de sus errores. ¿O no?… ¿O no?