La Presidenta del Superior Tribunal negó presiones políticas sobre la Justicia entrerriana
Susana Medina, presidenta del Superior Tribunal de Justicia (STJ) de la provincia afirmó en declaraciones a APFDigital que la relación de la Justicia con los poderes políticos es “excelente” y negó que existan presiones del Ejecutivo o la Legislatura sobre el Poder Judicial.
Al analizar la relación entre el Poder Judicial y los otros poderes del Estado, Medina afirmó que en Entre Ríos existe “una excelente relación. El Poder Judicial es independiente pero eso no quita que tengamos una relación cordial y de cercanía. De hecho: nos conocemos todos”.
Sin embargo “a la hora de que cada uno haga su trabajo, lo hace con responsabilidad e independencia”, apuntó.
La titular del STJ dijo que el Poder Judicial ha respetado al poder político representado por el Ejecutivo y la Legislatura. “Absolutamente”, sentenció. A renglón seguido, destacó que lo mismo ocurrió en sentido contrario.
“Jamás he recibido de este gobernador (Gustavo Bordet) ni de los anteriores un llamado telefónico. Nunca. Fueron y son absolutamente respetuosos de la independencia del Poder Judicial. Hemos compartido momentos institucionales muy amables y cordiales pero jamás nadie me ha dicho qué he tenido que hacer ni me ha pedido una opinión”, detalló.
Entre Ríos “es una provincia sana”, dijo, donde no hubo nunca «Mesa Judicial» como la que se articuló en el Gobierno de Mauricio Macri para actuar sobre las decisiones de la magistratura.
“La mesa que se ve es la interinstitucional donde hablamos de manera cordial, podemos discrepar y manifestar ideas diferentes pero los resultados son favorables. Hemos mandado tres proyectos de ley: la modificación del Código Procesal Penal, del Procesal Laboral y la ley de aranceles del Colegio de Abogados. Se trabajó durante todo el año y el producto fue bueno”, reseñó.
• La relación con Fiscalía
A pesar de que en los últimos tiempos se observaron tironeos y pujas entre el Superior Tribunal y el Ministerio Público Fiscal (MPF), Medina aseguró que la relación con la Fiscalía es “muy buena”. “Lo que ve la ciudadanía tal vez de deba a un error conceptual”, precisó.
“Yo lo conozco al Dr. Jorge Amilcar Luciano García, Procurador General, desde hace 40 años. Iniciamos juntos la carrera judicial. Tenemos una larga y estrecha amistad”, confesó.
Pero eso “no quita que, a la hora de tener que hacer el rediseño institucional porque la Constitución le da independencia y autonomía funcional a los Ministerios Públicos, no tengamos que sentarnos a conversar para ver cómo lo llevamos adelante”, agregó.
“Lo mismo ocurre con el Defensor General, Maximiliano Benítez, con quien tengo una excelente relación”, acotó.
Entre el STJ y los Ministerios Fiscal y de la Defensa “tenemos que diseñar cómo trabajamos. Sobre todo si tenemos que seguir incorporando nuevos organismos y funciones y los edificios son antiguos y no alcanzan los lugares”, describió.
En ese orden, le bajó el precio a los ataques que la ex segunda de García, Cecilia Goyeneche, lanzó a integrantes del Superior Tribunal antes, durante y después del jury que culminó con su remoción del cargo por mal desempeño en la causa “Contratos”.
“De Goyeneche no voy a hablar porque puedo tener que intervenir en algún proceso. Está (la situación de la ex procuradora adjunta) en instancias legales. Hay que estar (sujeto) a esos tiempos y procesos”, explicó.
Además, confesó: “En lo personal, nunca sentí que fuera un ataque. Se dan esos malos momentos producto del trabajo diario, las tensiones y el stress. Pero afortunadamente eso fue pasando. También creo que esta virulencia fue alentada por algunos medios. Pero esto no solo le hace mal al Poder Judicial, sino también a la ciudadanía de a pie, que tiene otros problemas porque está tratando de sobrevivir”.
Por eso “nosotros, que formamos parte del Poder Judicial junto a los otros poderes, tenemos que poner el acento y mirar esos problemas, no los otros. Acá no tendríamos que generar ningún problema. Siempre digo que quienes ejercemos el poder somos doblemente responsables: por nosotros mismos pero fundamentalmente por los demás, gente que está mirando y esperando de nosotros conductas éticas y que no tengan reproche. Se trata de hacer cada día mejor nuestra función”,
• Un lugar en la Corte
Con respecto a las especulaciones que periódicamente la ubican como posible candidata a ocupar un sitial en la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Medina fue cauta. “Es una versión periodística. Nunca hubo ningún ofrecimiento”, aseveró.
La relación que podría haber llevado a esta teoría es “que me vinculan con (la ex ministra de la Corte) Carmen Argibay y con Helena Highton”, consideró la vocal del STJ. Tanto Argibay (fallecida) como Highton (jubilada) integraron la Corte de principios de siglo que devolvió al máximo tribunal la credibilidad perdida durante el período de la Corte menemista de la «mayoría automática».
“Obviamente, sería un honor poder estar en ese lugar. Pero hay colegas mucho más preparadas y con mucha más formación académica que yo y que merecen ese cargo”, evaluó.
“Yo puedo seguir trabajando para la promoción y defensa de los derechos humanos de las mujeres como vengo haciéndolo hace 30 años desde el lugar en el que esté”, agregó.
Además, planteó: “Ojalá que a la Corte vaya una mujer y bien preparada. Las hay. Y son muchas”.
• Evaluación Juicio Jurados
“Fui jueza de Instrucción y antes fiscal y defensora oficial, además de tener 10 años de ejercicio libre de la profesión. Siempre fui partidaria del juicio por jurados. Creo que es muy importante que la ciudadanía participe de las decisiones jurisdiccionales. Es una forma de recuperar la confianza perdida en el sistema”, definió.
“Es una muestra cabal de lo que es la democracia republicana como sistema de Gobierno. El juicio por jurados ha resultado un procedimiento muy exitoso”, evaluó. Medina considera que aún no es tiempo de retoques al esquema actual. “Se verá con el tiempo, pero todos los juicios han sido muy exitosos”, apuntó.
“Se hizo mucho esfuerzo para poner en marcha este sistema. Sobre todo en algunas localidades donde no había salones apropiados o sistemas de videograbación. Otras veces se nos dificulta el traslado de los jurados o la vianda para que tengan en los días en que están trabajando. Es complicado, pero a pesar de eso y de la pandemia pudimos llevar adelante esta forma de juzgamiento”, agregó.
También se definió como partidaria de ampliar el esquema de jurados a otros fueros, como el civil o el laboral. “La Constitución no dice (juicio por jurados) para el fuero penal. Dice para todos”, apuntó.
Además, resaltó que se debería ampliar el rango de delitos que es juzgados por este sistema, incluyendo “los que son contra la administración pública, cometidos por los funcionarios en el ejercicio de sus funciones. Todo tiene que ser juzgado por la ciudadanía”, resaltó.
“Es el derecho que tiene la ciudadanía de juzgar delitos que la perjudican y que afectan a los más pobres, a los más vulnerables. Porque el dinero que se va para otros fines se saca de planes sociales, de salud pública, de educación. Entonces ¿qué mejor que el ciudadano que es el que con impuestos paga nuestros sueldos, sea quien juzgue conductas antijurídicas que lo afectan?”, se preguntó.
• Oralidad
La titular del Superior Tribunal dijo que el paso del procedimiento escrito al oral en los distintos fueros de la justicia provincial “va muy bien”.
“La oralidad ha avanzado mucho. Ha acortado los tiempos. Y facilitado que las audiencias sean presenciales con el juez y las partes. Allí el magistrado puede ver a los ojos a quien está juzgando”, comentó.
Este sistema “ha venido para quedarse y tiene que estar en todos los fueros. Facilita los procesos, hace a la transparencia, a la igualdad de oportunidades y al acceso a la Justicia. Yo solamente le veo buenas posibilidades” a la oralidad, apuntó.
• Su relación con Francisco
Medina recordó que su vínculo con el Papa Francisco comenzó en junio de 2016 cuando fue invitada a un congreso internacional de jueces sobre la trata de personas y el crimen organizado.
Junto a una magistrada chaqueña, fueron las únicas representantes de la justicia de provincia ya que el resto de la delegación argentina estuvo conformada por magistrados federales.
En 2017 volvió a Roma, como disertante en otra jornada. “Esa vez me invitaron a quedarme alojada en Santa Marta. Fue una distinción para mí compartir esos días con Su Santidad y otros sacerdotes. La residencia está cerca de la basílica de San Pedro, es un lugar muy cómodo pero sin ningún lujo ni ostentación donde se respira humildad”, recordó.
Al año siguiente retornó a Roma, en diciembre. A partir de entonces realizó actividades frecuentes con la Pontificia Academia de las Ciencias Sociales.