Salud pública
La guardia del hospital, un lugar de consultas y no de urgencias
Reiteran la clasificación de diagnósticos y la prioridad de pacientes.
Nogoyá.- Una vez más, la guardia de urgencias del hospital cabecera del departamento dio a conocer las cifras de pacientes que atiende a diario, como así también la clasificación de los cuadros de gravedad de los mismos.
Los vecinos que acuden a la guardia se incrementan semanalmente, debido al brote de dengue que padecemos y además debido a la falta de otras instituciones sanitarias que cuenten con un servicio completo como el que brinda el hospital público. Si bien el sanatorio privado tiene guardia activa, el mismo no cuenta con servicio de traslado ante casos graves, por lo que deriva esos pacientes hacia la entidad estatal. Sumado a esto podemos citar la situación económica actual, donde el vecino buscará evitar abonar consultas médicas que promedian los diez mil pesos, dependiendo la especialidad.
Esas situaciones lograron que en la última semana la guardia del San Blas registre un record de atención, donde se contabilizaron 573 personas, es decir unos ochenta vecinos por día acudieron al servicio público de salud.
Asombroso fue el dato que arrojó el servicio de guardia, afirmando que de esos casi 600 pacientes, solo el 1.8% representaron riesgo de vida, “solamente 10 personas fueron atendidas con código rojo” confirmaron desde el efector, remarcando que la guardia hospitalaria tiene como prioridad la atención de pacientes con riesgo de vida, luego vienen el resto de atenciones con el tiempo de espera correspondiente, solicitando paciencia a las personas que se acercan frecuentemente, porque muchas veces, los médicos deben salir acompañando una urgencia de traslado a Paraná y queda un solo médico en la guardia, como paso el fin de semana último.
Atención por triage
La guardia general prioriza la atención no por orden de llegada sino basada en un
triage que clasifica el cuadro de los pacientes que acuden a ella.
“Cada enfermera o médico, indica qué pacientes hay que atender primero según la gravedad de los mismos, no según el orden de llegada. Por ejemplo, si tenemos una persona esperando, con dolor de espalda, y por puertas de urgencias ingresa una ambulancia por un accidente de tránsito, este último, será atendido con prioridad y hasta puede ser derivado y los que están en espera, deben entender este punto” explicaron desde la entidad sanitaria, fundamentando que el triage sirve para asegurar una valoración rápida y ordenada de todos los pacientes que llegan a los servicios de urgencias, identificando a aquellos que requieren atención inmediata.
“Por eso se deja bien en claro que la atención no es por orden de llegada, sino por urgencia o inmediatez”.
Los niveles de clasificación de pacientes se definen por colores. En rojo se encuadran las personas que deben recibir atención inmediata, que revisten compromiso de vida; en naranja se incluyen las atención de alta complejidad, cuyo tiempo de espera no debe superar los treinta minutos, como es el caso de quemaduras, sangrado, etc.
En amarillo, se clasifican las crisis hipertensas (alta/baja de presión arterial), contusiones múltiples, entre otras dolencias, cuya atención se puede dar entre los sesenta y noventa minutos.
Por último, en verde se encuentran los cuadros no urgentes cuya espera puede alcanzar las tres horas, como es el caso de cuadros gastrointestinales y dolencias respiratorias leves. En azul se encuentran los pacientes que presenten un cuadro estable y su atención será determinada por la demanda asistencial del momento.