Economía
La demanda laboral en Argentina se encuentra en su punto más bajo en años
Con pocas perspectivas de recuperación a corto plazo, los trabajadores enfrentan un panorama desafiante en la búsqueda de empleo.
En medio de una recesión económica ya consolidada en Argentina, la demanda laboral se desploma, evidenciando un panorama complicado para los trabajadores en el país. Con tres meses consecutivos de caída en la actividad económica, las perspectivas de una pronta recuperación son escasas, y las empresas muestran una reticencia sin precedentes a la contratación de nuevos empleados.
Según los datos revelados por la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) elaborada mensualmente por la Secretaría de Trabajo, apenas el 2,3% de las empresas tienen planes de contratar nuevos trabajadores en los próximos meses. Este dato contrasta dramáticamente con el 95,2% de empresas que planean mantener su actual planta de personal, y el 2,5% que considera despidos.
Es importante destacar que estos datos se limitan a empresas con 10 o más trabajadores, excluyendo así a las microempresas y a las pymes más pequeñas, lo que podría subestimar la verdadera magnitud del problema.
Si se observan los datos históricos, la proporción de empresas considerando aumentar su fuerza laboral es la más baja de la última década. Mientras que en años anteriores, como 2017 y 2018, más del 10% de las empresas tenían intenciones de contratar, en la actualidad este número se ha reducido drásticamente.
La situación se torna aún más preocupante al analizar las tasas de búsqueda de empleo según el nivel de calificación. Los trabajadores no calificados tienen las mejores oportunidades, con una tasa de búsqueda del 3%, seguidos por los técnicos (1,5%), los operativos (1,4%) y los profesionales, cuya tasa de búsqueda es apenas del 0,9%.
Además, del total de búsquedas de empleo, el 81,5% no especifica preferencia de género, mientras que el 12,8% prefiere contratar mujeres y solo el 5,7% busca empleados masculinos.
Otro indicador alarmante es el aumento en la proporción de despidos sin causa, que alcanzó su punto más alto en febrero de este año desde 2020. Mientras tanto, los despidos con justa causa aumentaron y las renuncias disminuyeron.
Al analizar la evolución del mercado laboral según la rama de actividad, se observa un estancamiento en varios sectores y una fuerte caída en la construcción, que perdió un 11,2% de trabajadores en los últimos doce meses.