Bolsa de Comercio de Rosario
La chicharrita y sus estragos: El récord de siembra de maíz no logra mitigar las pérdidas
A pesar del récord de siembra de maíz en Argentina, la proliferación de la chicharrita ha provocado estragos en la producción, dejando a los agricultores enfrentando pérdidas significativas
La campaña de maíz 2023/24 en Argentina con casi 8,9 millones de hectáreas sembradas, se convierte en un récord histórico para el país. Este logro se ha impulsado gracias a la tecnología de relevamiento satelital, que permitió identificar 280.000 hectáreas adicionales en la región núcleo. Sin embargo, este aumento en el área sembrada no ha sido suficiente para contrarrestar los efectos devastadores de un diminuto pero poderoso enemigo: la chicharrita, un insecto transmisor del Spiroplasma.
Los datos provienen de un reciente informe de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR). Según Cristian Russo, jefe de la GEA, la situación es crítica. A pesar de sumar 300.000 hectáreas más en comparación con la temporada anterior, el maíz enfrenta una disminución estimada de 3 millones de toneladas en su producción. Russo lamenta que, de no ser por el área adicional encontrada, la pérdida habría sido aún mayor, alcanzando casi los 5 millones de toneladas.
El impacto más severo se ha sentido en la provincia de Córdoba, el epicentro de la producción de maíz en Argentina. Se estima una reducción de 2,76 millones de toneladas en su producción, lo que representa una caída del rendimiento provincial de 11,4 quintales por hectárea en comparación con el mes anterior. Se esperaba que Córdoba superara los 21 millones de toneladas de producción si no hubiera sido por el brote de chicharrita.
El informe de GEA también señala recortes significativos en otras provincias del norte argentino, como Santiago del Estero y Chaco, donde se han registrado pérdidas masivas de áreas que no serán cosechadas para grano comercial, con rendimientos entre 10 y 40 quintales por hectárea. Russo describe la situación como "un desastre impresionante".
A nivel nacional, con un 25% de la cosecha completada, se observa un atraso del 7% en comparación con el año anterior, lo que complica aún más el panorama para los productores locales. A pesar del aumento en el área sembrada, un total de 1,42 millones de hectáreas no entrarán en el circuito comercial, lo que impacta directamente en la estimación de producción total, situada en 47,5 millones de toneladas. Aunque este número representa un aumento del 32% en comparación con el ciclo anterior, está muy por debajo de los niveles esperados.
Mientras tanto, otros cultivos como el trigo y la soja enfrentan sus propios desafíos. El trigo anticipa una mejora en las condiciones de siembra para el ciclo 2024/25, aunque la decisión final de los productores aún no está clara debido a los costos crecientes y la preocupación por completar la cosecha actual. Por otro lado, la soja muestra un avance en la cosecha del 44%, pero se encuentra retrasada en un 30% respecto a una campaña "normal".