Sociedad
Juegos en línea y ludopatía en la adolescencia
Un abordaje sobre cómo captan la atención las aplicaciones y entornos de apuestas en línea • La importancia de la temprana detección e intervención de un profesional.
Continuamos abordando una problemática que ya iniciamos en ediciones anteriores: los juegos en línea y en una franja etaria como la adolescencia, ahora con la ayuda profesional de una psicóloga que trabaja en tres salas municipales e interviene de forma particular en este tipo de abordajes.
Flavia Gauna dialogó con Paralelo 32 sobre este complejo entramado que configura esta forma de ludopatía. “Jugar es una actividad que puede ser una fuente de diversión, aprendizaje y socialización. Sin embargo, cuando el acto de jugar se convierte en una necesidad compulsiva, se transforma en un problema serio conocido como ludopatía”.
La entrevistada añade que este trastorno afecta a individuos de todas las edades, pero los adolescentes son especialmente vulnerables en un contexto donde las apuestas en línea cada día son de más fácil acceso. “Los juegos de apuestas online pueden empezar como algo inofensivo para luego convertirse en una enfermedad”.
El juego como Enfermedad
La ludopatía, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se caracteriza por la incapacidad crónica y progresiva de resistir los impulsos de jugar apostando dinero. Esta condición fue incluida en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), lo que subraya su reconocimiento como una enfermedad.
“Es fundamental entender que no todas las adicciones están vinculadas al consumo de sustancias; la ludopatía, al igual que la adicción al móvil, se manifiesta como un comportamiento compulsivo que interfiere con la vida cotidiana”, continuó Gauna.
La ludopatía se manifiesta de varias maneras y los diagnósticos son esenciales para comprender su gravedad. Según la profesional que recibe consultas en las salas municipales Isidro Reggiardo, Bicentenario y Luján, “para que un comportamiento se considere patológico, debe existir un patrón problemático y recurrente de juego que cause un deterioro significativo en la vida del individuo. Este deterioro puede verse reflejado en la necesidad de apostar cantidades crecientes para obtener la excitación deseada. El individuo puede experimentar irritabilidad al intentar reducir o abandonar el juego, y a menudo se encuentra atrapado en un ciclo de pensamientos obsesivos sobre las apuestas”.
Además, advierte Gauna, los adolescentes pueden caer en la trampa de intentar “recuperar” las pérdidas, lo que a menudo resulta en un aumento del comportamiento de juego. “Este ciclo de necesidad y desesperación se agrava con el tiempo, llevando a muchos a mentir sobre su implicación en el juego o a poner en peligro relaciones significativas, su rendimiento académico o incluso su estabilidad financiera”.
Los Adolescentes y la Vulnerabilidad
Ahora, por qué los adolescentes son particularmente susceptibles a la ludopatía. “Hay varias razones: Su cerebro está en pleno desarrollo, especialmente en áreas relacionadas con la toma de decisiones y el autocontrol, lo que los hace más propensos a comportamientos impulsivos. Además, la influencia de sus pares y la exposición constante a juegos y apuestas en línea a través de dispositivos móviles aumentan el riesgo. La búsqueda de gratificación instantánea, un rasgo característico de esta etapa de vida, los impulsa a participar en juegos que ofrecen recompensas rápidas, perdiendo la noción del tiempo y del dinero invertido”.
Los Circuitos de Recompensa
Aquí interviene lo que se conoce como el ‘sistema de recompensa’, “donde el cerebro guía la conducta por medio de neuronas, es decir, células nerviosas. Los circuitos de recompensa en el cerebro son fundamentales para entender cómo se desarrolla la ludopatía, especialmente en el contexto de las apuestas en línea. Cuando los adolescentes juegan y experimentan recompensas, el sistema homónimo se activa, liberando dopamina, lo que genera placer. Este proceso puede llevar a un ciclo en el que la búsqueda de recompensas eclipsa el juicio y conduce a comportamientos de riesgo y/o a la utilización del juego como una forma de regular emociones negativas”.
Apuestas en Línea y sus Efectos
Las apuestas en línea representan una forma moderna de juego que ha crecido exponencialmente en popularidad, especialmente entre los jóvenes. La facilidad de acceso a plataformas, a través de dispositivos móviles, y la promesa de ganancias rápidas, pueden aumentar el riesgo de desarrollar comportamientos de juego problemáticos. “La combinación de la disponibilidad constante y el atractivo de las recompensas instantáneas puede crear un entorno propicio para la adicción”.
Cómo darse Cuenta
Los padres deben estar atentos a ciertas señales que indican que sus hijos podrían estar enfrentando problemas relacionados con los juegos y las apuestas en línea. Aquí Gauna habla de cambios en el comportamiento como el aislamiento social; el descuido en las responsabilidades académicas y la irritabilidad, son señales de alarma. “Hablar abiertamente sobre sus actividades en línea y establecer límites claros puede ser clave para prevenir el desarrollo de una relación problemática con el juego”.
También es oportuno, además de lo que anteriormente propusimos desde los controles parentales de aplicaciones disponibles, una promoción de actividades alternativas. “Fomentar un entorno donde los adolescentes puedan explorar otras pasiones y establecer conexiones significativas puede ser la clave para un desarrollo saludable y equilibrado”.
9 signos de alarma
Estos son 9 signos, mediante preguntas clave, que nos advierten de una posible alteración o riesgo de ludopatía:
1- En el último período, ¿has aumentado el tiempo destinado al juego?
2- ¿Has incrementado la cantidad de dinero apostado a lo largo del tiempo?
3- Después de perder, ¿has regresado tan pronto como fuera posible para intentar recuperar el dinero?
4- Cuando estás atravesando problemas personales o situaciones de estrés, ¿jugás para evadir esas realidades?
5- ¿Pasás mucho tiempo pensando en actividades relacionadas al juego (por ejemplo planeando apuestas o preocupado por cómo obtener dinero para jugar)?
6- ¿Has negado, ocultado o minimizado tu forma de jugar ante personas allegadas?
7- Si pasas varios días sin ir a jugar, ¿tu conducta se torna impaciente?
8- ¿Has descuidado relaciones familiares, trabajo o estudio a causa del juego?
9- ¿Has pedido dinero prestado que no has podido devolver a causa del juego?