Judicial
Investigación: la empresa que usó Kueider para justificar el dinero, sus conexiones, poderes y una trama internacional
El 30 de julio del año pasado marcó un punto de quiebre para la empresa Golsur, cuando esta pasó a manos de dos ciudadanos paraguayos: un abogado y un comerciante que adquirieron el 50% de las acciones cada uno, desembolsando apenas 10 millones de guaraníes (aproximadamente 1.200 dólares). Sin embargo, apenas dos meses después, los nuevos accionistas otorgaron un poder amplio a Iara Guinsel Consta, secretaria del exsenador argentino Edgardo Kueider, lo que levantó sospechas sobre los verdaderos propietarios y el propósito detrás de estas operaciones.
Una investigación de Infobae reveló documentos, facturas y resoluciones oficiales que destapan la compleja trama de Golsur, que incluye vínculos con Kueider, cambios societarios y poderes que habilitaron maniobras de amplio alcance en Paraguay.
Compra y cambio de manos
Según los registros, los nuevos dueños, José Fernando Courisat y Amado Andrés Torales Benega, adquirieron las acciones de Pedro Roure Rius y María Fernanda Sbrocca por 10 millones de guaraníes cada uno. Los compradores asumieron roles clave en la firma: Torales Benega como presidente y Courisat como representante legal. Sin embargo, los registros de la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DNIT) no reflejaron estos cambios, manteniendo a Roure Rius como representante legal, quien aseguró desconocer tanto a los nuevos dueños como a Kueider y Guinsel Consta.
El rol de Guinsel Consta
El 15 de octubre, la secretaria de Kueider recibió un poder amplio de Courisat y Torales Benega, habilitándola para manejar la empresa. Este poder le permitía gestionar negocios, bienes e intereses, aceptar créditos, pagar obligaciones y realizar todo tipo de transacciones financieras a nombre de Golsur.
Los documentos aportados al expediente indican que Kueider y Guinsel Consta habrían buscado durante meses una sociedad para operaciones inmobiliarias en Asunción. Un empresario local confirmó que en junio intentaron adquirir cinco departamentos, pero la operación no prosperó por falta de una sociedad anónima adecuada.
Nuevos giros de la investigación
En octubre, Golsur obtuvo autorización para operar en sectores como actividades inmobiliarias, construcciones civiles e industria publicitaria. Sin embargo, el domicilio registrado de la empresa, Alberdi 734 en Asunción, coincide con el de una empresa dedicada a la venta de sociedades anónimas, lo que refuerza las sospechas de irregularidades.
Pedido de extradición y expectativas judiciales
Actualmente, tanto Kueider como Guinsel Consta cumplen prisión domiciliaria en Asunción. La jueza federal argentina Sandra Arroyo Salgado solicitó su extradición para ser juzgados en el país, pero el proceso enfrenta demoras. La fiscalía paraguaya indicó que el pedido tiene defectos formales y prevé tomarse hasta cuatro meses para avanzar en la causa.
Las investigaciones bancarias sobre Golsur y posibles movimientos financieros de Kueider y Guinsel Consta podrían ser clave para determinar la existencia de delitos como lavado de activos o contrabando. Mientras tanto, la trama de Golsur sigue sumando capítulos, dejando entrever una red de maniobras con implicancias políticas, legales y económicas en ambos países.