Infraestructura pluvial de las ciudades
Innovadoras soluciones para enfrentar las inundaciones urbanas
Construir entornos urbanos más resilientes y sostenibles es crucial en el contexto actual de cambio climático.
Según datos recientes de las Naciones Unidas, las lluvias extremas y las inundaciones globales han aumentado en más de un 50% durante la última década, con una tasa de ocurrencia cuatro veces mayor que en 1980. Este fenómeno no solo afecta a nivel mundial, sino que también tiene un impacto significativo en Argentina, donde se registran pérdidas anuales de alrededor de US$ 1.000 millones debido a inundaciones, según el Banco Mundial.
Las inundaciones no solo dañan la infraestructura y los servicios clave, sino que también afectan la disponibilidad del agua, el saneamiento y otros aspectos de los medios de subsistencia humanos. Ante esta problemática, es común cuestionar la infraestructura pluvial de las ciudades y debatir sobre la necesidad de invertir en redes de drenaje más grandes. Sin embargo, ¿es esta la única solución?
Según Sandra Pérez, Gerente de Producto Global de Amanco Wavin, los sistemas de drenaje pluvial convencionales, aunque necesarios, no son la única solución viable. El rápido crecimiento urbano y la impermeabilización del suelo mediante la construcción de pavimentos y edificaciones son factores clave que contribuyen al aumento de las inundaciones. Esta impermeabilización impide que el agua de lluvia se infiltre en el suelo, lo que provoca un aumento en la escorrentía superficial y los caudales de ríos y arroyos cercanos durante los eventos de precipitaciones.
Para abordar este problema, se están implementando los Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible (SUDS), que buscan recrear las condiciones naturales del área antes de la urbanización. Estos sistemas permiten gestionar el agua de lluvia en el lugar donde cae, reduciendo la escorrentía superficial y evitando la sobrecarga de los sistemas de drenaje urbanos.
Una solución innovadora para enfrentar las inundaciones urbanas son las celdas que permiten captar e infiltrar, atenuar o almacenar los picos máximos de lluvia, y pueden ser instaladas en una variedad de ubicaciones, desde plazas hasta edificios. Fabricadas con material reciclado y con una alta resistencia mecánica, ofrecen una alternativa económica y rápida de ejecutar en comparación con las soluciones de alcantarillado tradicional.
Además de almacenar el agua de lluvia para su posterior uso en actividades como la limpieza urbana y el riego de la vegetación, estas soluciones también contribuyen a recargar los acuíferos subterráneos y reducir el consumo de agua potable para usos no destinados al consumo humano.