Fidel Martínez, el artista entrerriano que viaja por el mundo con su música
Victoria.- Fidelirante. Así lo tenía agendado la persona que nos pasó el contacto. Se trata de un juego de palabras, una amalgama entre Fidel, su nombre, y delirante, un epíteto que él mismo se puso. Fidel Martínez es un artista que recorre el mundo con su guitarra Midland, su amplificador Ss-Pro y su pedalera Nux. No mucho más que eso. Casi nada más que eso.
¿Quién es Fidel Martínez?
Abre el estuche de la viola, le da play a una base y empieza a zapar. La gente de Victoria está confundida, no está acostumbrada a este tipo de espectáculos. El escenario es la plaza San Martín, específicamente las escalinatas del museo al prócer.
“La locura y la enfermedad mental son dos cosas diferentes”, comienza Fidel. “Desde chico me gustaba la palabra delirante. Busqué la etimología y viene del latín [de-lirare, salir del surco al labrar la tierra], de la agricultura. Cuando se sembraba se hacía un surco recto donde se colocaban las semillas, las semillas que caían fuera del surco delineado eran semillas delirantes, que estaban fuera de la línea recta”, explica.
La ética y la estética de Fidel gira entorno a esto, al delirio. El delirio como un concepto que habla de romper el molde, de pintar saliéndose de las líneas, de viajar sin planificar. Bohemia y delirio, quizá esas palabras sean las que más apropiadas para empezar a contar quién es Fidel Martínez.
El viaje es uno sólo
Estuvo por tantas partes que ni se preocupa en mencionarlas todas. Chile, Ecuador, tantas provincias y ciudades del país. En el último mensaje que nos envió nos contaba que estaba en los cerros, queriendo llegar a Gualeguay con la gracia de algún camionero.
“Vine a Victoria porque tenía que buscar mi título del profesorado de música. Pero a los viajes yo los tomo con un sentido espiritual, me gusta la bohemia. Vine a dedo. Y ya que estaba, decidí que no solamente venía a Victoria a buscar el título, sino también a experimentar el desafío de no saber qué va a pasar”, narra.
Fidel comenzó el viaje a los veintidós años. En realidad, y por más que haya caminado mucho, se trata de un solo viaje. Una única travesía donde busca la belleza y, a la vez, la porta. Decir que Fidel es de Diamante es un dato sumamente irrelevante ya que ahora, a sus veintiocho años, lo único que planea es seguir viviendo la bohemia.
“La música es un mundo de búsqueda que no se termina nunca. Tiene que ver con lo espiritual. Es algo que trasciende la materia”, dice.
“De nada sirve que viva como un rey inútil / junto a este hogar apagado, entre rocas estériles, / el consorte de una anciana, inventando y decidiendo / leyes arbitrarias para un pueblo bárbaro, / que acumula, y duerme, y se alimenta, y no sabe quién soy. / No encuentro descanso al no viajar; quiero beber / la vida hasta las heces (…)”, escribió Tennyson en su Úlises. Y seguramente Fidel también tiene mucho de ese Ulises que no pudo quedarse en su Itaca.
Simplemente así
—Más allá de que tengas un espíritu bohemio, el mundo se maneja con dinero, ¿cómo pagás tus viajes?
—Dejo abierta la funda y la gente colabora. Así. Simplemente así.
Más sobre Fidel
Aquellos que quieran conocer más sobre Fidel pueden buscarlo en Facebook como “Fidelirante”. También, pueden buscar su película musical en Youtube escribiendo: “El Disco (película completa) – Walking – Pitter Walk”.