Política
El Gobierno logra dictamen de mayoría para la ‘Ley Bases’ en el Senado
La jornada dejó al descubierto las profundas divisiones políticas y las dificultades para avanzar en reformas clave. Mientras tanto, la pospuesta reforma fiscal sigue siendo un tema pendiente que requerirá nuevas negociaciones y posibles concesiones en los días siguientes.
Este miércoles 29 de mayo, el Gobierno nacional enfrentó una jornada crucial en el Senado con la mejor oportunidad para avanzar en la aprobación de dos proyectos clave: la ley Bases y la reforma fiscal.
A casi un mes de haber ingresado al Senado la ley de Bases y el paquete fiscal, La Libertad Avanza (LLA) consiguió las firmas para el dictamen y podría sellarlo este jueves, según especificaron fuentes oficiales.
Debate y tensiones en el Senado
La jornada de debate en el Senado no solo se centró en la ley Bases, sino también en el paquete de la reforma fiscal, que enfrenta numerosas trabas. A pesar del intenso debate, no se llegaron a concretar acuerdos sobre la reforma fiscal, cuya discusión se pospuso.
En el inicio del plenario, tomó la palabra el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala (La Libertad Avanza) y expresó su optimismo: “Surgió un borrador que vamos a hacer circular a los efectos de que este dictamen tenga la cantidad de firmas que exige la reglamentación para poder pasarla a sesión a esta ley que para el oficialismo es muy importante y necesaria". El Gobierno contaba con apoyo de los representantes del Frente Renovador misionero y Juntos Somos Río Negro.
Los senadores remarcaron la importancia del tiempo en que el proyecto fue debatido en comisiones y la incorporación de modificaciones con respecto a lo votado en Diputados. "Evidentemente la ley que vino era mejorable y es evidente que lo que los senadores planteamos en la primera reunión plenaria tenía lógica", planteó Guadalupe Tagliaferri (PRO).
Martín Lousteau -presidente del partido radical- presentó dictamen propio, y consideró que los cambios realizados fueron "cosméticos": pidió nuevos articulados en privatizaciones y el RIGI. En un encendido discurso con impronta federal, Pablo Blanco -también de la UCR-coincidió con estos puntos y añadió críticas a las facultades excepcionales, pero acotó que apoyará el proyecto: "Me veo obligado por razones esencialmente partidarias".
El bloque de Unión por la Patria se opuso en su totalidad: durante el debate, aportaron sus miradas en rechazo sobre el RIGI, la reforma moratoria y las privatizaciones. El formoseño José Mayans (Unión por la Patria) contradijo la perspectiva del Gobierno cuando remarcó su postura de consensos. "El verdadero diálogo es cuando se habla con las fuerzas opositoras y se contempla la posibilidad de resolver los problemas de los distintos sectores y de las provincias", consideró.
Prioridades y estrategias del Gobierno
La aprobación de la ley Bases era una prioridad principal para el Gobierno, lo que se evidenció en las reuniones de alto nivel con los presidentes de los bloques y la suspensión de la participación de la canciller Diana Mondino en el Senado. La situación terminó de destrabarse luego de que el flamante jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y la vicepresidenta Victoria Villarruel, se reunieron al caer la tarde con los senadores José María Carambia (Por Santa Cruz), Guadalupe Tagliaferri (Pro-Capital) y el entrerriano Edgardo Kueider. Los tres votaron en disidencia parcial y el proyecto de Ley Bases alcanzó la mayoría necesaria para obtener dictamen. La compañera de bancada de Kueider, Alejandra Vigo, también acompañó en disidencia.
En el medio, sin embargo, se abrió un proceso de negociación y blindaje de algunos organismos para que, cuando el proyecto vuelva a la Cámara de Diputados, no se ratifique lo que allí se había votado y ponga en peligro organismos tales como el Banco de Datos Genéticos.
Entre las iniciativas con las que insistió Kueider fueron la eliminación de la carga impositiva en las tarifas así como también con la transferencia de la administración de Salto Grande a la provincia. Según reconstruyó Página Política, lo que acordó fue que la represa pase a ser administrada por Entre Ríos. En la actualidad, la administración es binacional y depende del gobierno nacional.
Posturas divergentes y un difícil consenso
El debate mostró las profundas divisiones dentro del Senado. Guadalupe Tagliaferri del PRO remarcó la importancia de las modificaciones realizadas en comisión, mientras que Unión por la Patria, liderada por José Mayans, se opuso en su totalidad, criticando especialmente el RIGI, la reforma moratoria y las privatizaciones.
El senador Edgardo Kueider, cuya decisión era clave, finalmente firmó el dictamen de mayoría en disidencia. Su voto fue crucial para alcanzar la mayoría necesaria, aunque no sin generar controversia dentro de su propio partido y entre otros dirigentes peronistas, quienes criticaron duramente su decisión.
A lo largo de los últimos días, Kueider se mostró muy enojado con los peronistas, que en las últimas semanas, desde diferentes sectores, emitieron comunicados y declaraciones para que rechazara el proyecto del Gobierno. A excepción de los intendentes, interesados por el paquete fiscal que implica la restitución del Impuesto a las Ganancias, que se coparticipa.
Reacciones y críticas internas
La decisión de Kueider desató una ola de críticas desde el interior del PJ. Dirigentes como Carina Ramos y Juan Manuel Huss expresaron su descontento, calificando su acción como una traición al pueblo y a los principios del peronismo. Jorge “Kinoto” Vázquez fue aún más vehemente, sugiriendo que la crisis moral que atraviesa el movimiento exige una reevaluación y posible expulsión de aquellos que actúan en contra de sus principios.