Dr. Miguel Angel Oneto: “Desde mi opinión todo esto está teñido de una gran hipocresía”
Crespo- El doctor Miguel Angel Oneto es un experimentado profesional de alto prestigio en nuestra provincia, director de Clínica Parque, a quien acudimos para dialogar sobre la llamada Ley de interrupción voluntaria del embarazo, cuando se conoció su aprobación en Diputados. Básicamente nos interesaba saber en qué medida afecta la misma al sector privado de la salud, pero además, sumar su opinión autorizada sobre la concepción y la vida. Plantea esta cuestión como un dilema, porque “hay que seguir uno de los dos caminos y ninguno de los dos es bueno, pero es obligatorio tomarlo”. Ve hipocresía en los que argumentan que esta ley es necesaria para evitarles penurias a los pobres, pero incluye también a los ricos.
— Tiene media sanción la ley de interrupción voluntaria del embarazo. Si la confirmara el Senado tal como está redactado su texto, ¿en qué medida podría verse afectada la clínica bajo su dirección?
_En la Clínica Parque no hacemos abortos y seguramente vamos a seguir igual, pero mi opinión es que si la ley se aprueba, tampoco van a tener problema para hacer abortos quienes lo deseen, porque hay muchos profesionales que los hacen y por lo tanto clínicas, así que lo único que va a suceder es que van a blanquear lo que están haciendo, nada más.
— Si la ley no se modifica en el Senado, está expresamente establecido que un médico puede excusarse pero un establecimiento asistencial no puede hacerlo, tiene que prestar el servicio.
_No creo que se vaya a reglamentar como para que sea mandatorio proveer los recursos para que la gente venga a la clínica y pueda hacerse abortos, pero reitero que no va a ser un problema porque quien lo quiera hacer va a encontrar prestadores que lo harán sin inconvenientes.
— ¿Por qué? ¿Obligar violaría algún derecho?
_Por supuesto. Las clínicas no están obligadas a dar una práctica en particular, salvo cuando es necesaria para la salud y no hay otro que la pueda dar. Por ejemplo si alguien tiene un accidente o un traumatismo de cráneo, la clínica tiene obligación de poner todos los recursos que tenga a su disposición para atenderlo en ese momento y solo cuando está estabilizado, si no tiene recursos, debe usar los medios para que se pueda trasladar con seguridad hacia algún lugar público, si lo hay, donde atiendan a esos pacientes.
Esto se refiere a cuando la atención es necesaria inmediatamente, con peligro de vida, si no es así, no estamos obligados a dar todas las prestaciones que puedan pedirnos.
— Te podrán obligar con un aborto terapéutico en todo caso.
_No pueden obligar a quien no quiere a hacer un aborto, no estamos en guerra como para que el Estado se tome tamaña atribución.
Los profesionales que no quieren hacerlo no lo van a hacer.
En cuanto a las clínicas, en Entre Ríos, con excepción de un sanatorio de la provincia y los hospitales, los médicos no son empleados de las clínicas, por lo tanto no tienen poder para obligar a los médicos.
En las clínicas privadas los médicos son dependientes solo excepcionalmente, y esa excepción es para algunas prestaciones internas, por ejemplo el médico de guardia o el médico de la terapia intensiva. Incluso las obras sociales en general les pagan directamente a los médicos, no a través de las clínicas.
— Se diferencia en eso de los hospitales públicos
_En un hospital el médico es empleado, el hospital ordena al médico que haga lo que el hospital cree que tiene que hacer, pero son empleados del hospital, no es así en las clínicas de Entre Ríos, pero tampoco obligarían a los médicos a hacer lo que creen que no deben hacer.
De todas maneras no habría problemas para las mujeres que quieran abortar, porque habrá clínicas y hospitales que lo van a hacer, porque si no tienen problema de hacerlo ahora menos van a tenerlo después cuando esa práctica esté legalizada.
— ¿El problema se puede plantear si una mujer elige hacerlo en determinada clínica en particular, si hace un planteo judicial?
_La justicia tampoco puede forzar la objeción de conciencia, pero esa obligación no es generalizada, si no, no habría abortos ahora, por lo que es un problema abstracto.
–Se lo nota a usted decidido a no prestar ese servicio, pero qué pasa si alguno de los médicos aceptan hacerlo, usted no puede hacer objeción.
_En caso de legalizarse tendremos que tomar la decisión, de acuerdo a nuestras creencias, lo que diga la ley y las necesidades de las mujeres.
–La idea de los pro abortistas es que el aborto ya existe y hay que blanquearlo y ordenarlo.
_También son una realidad los motochorros y salteadores, actividades que nadie quiere legalizar. Si se aprueba la legalización del aborto no debiera ser por eso. Si se aprueba la ley debiera ser porque se considera que eliminar la vida de un individuo por nacer, es globalmente menos carga para la sociedad que el sufrimiento o el posible daño físico de la mujer por llevarlo en su vientre y darlo a luz.
Esto último es una evaluación sanitaria puramente técnica, en realidad la opción de la gente y los legisladores debiera centrarse en determinar si se está dispuesto a colocar la vida de los embriones como variable de una evaluación sanitaria, cuando en otros órdenes se la considera intangible.
–Se ha discutido sobre si hay vida desde la concepción, desde que hay un sistema nervioso o desde que el individuo tiene conciencia… ¿cómo se resuelve eso?
_Los embriones son seres humanos a los que les falta un tiempo para manifestarlo como lo hacemos nosotros, y si se cuestiona eso es porque no se quiere asumir la responsabilidad de eliminarlos electivamente.
Para eso se fuerzan argumentos para negarlo, como que no tienen el sistema nervioso desarrollado etcétera, en cuyo caso no son personas, y otras cosas por el estilo que hemos escuchado sobre este tema. La realidad es que un individuo en el vientre materno, que tiene el ADN de los seres humanos, que manifiesta vida y que si se lo deja en un tiempo va a manifestarse como lo hacemos nosotros, es porque es un ser humano como nosotros. Los argumentos en contra son para convencernos de que en caso de eliminarlo no estamos eliminando un ser humano, cosa que en nuestra cultura es algo inaceptable. De todos modos pienso que estamos frente a un dilema.
–Claro, siempre la solución del dilema es el mal menor.
_Un dilema es una situación en la que se llegó a un punto en que se está obligado a elegir una de dos alternativas y ninguna de las dos es buena.
Para el caso del aborto electivo, se tiene que aceptar que se opta entre la vida del ser humano que está en el vientre, o de la calidad de vida, sufrimiento posible y riesgo de la mujer en la que está, que también es un ser humano.
Hasta ahora se considera que la vida del ser humano es innegociable, la ley tiene que determinar simplemente que no lo es.
Llegado a este punto, para que la opción no sea dolorosa para el que opta, se utiliza el argumento incierto de que no es un ser humano o que no lo es tanto porque todavía no se manifestó. Eso es hipócrita, es hipocresía, porque si fuera así, también podríamos eliminar a los que están durmiendo, porque no se manifiestan visiblemente y hay que esperar un rato para ver que lo hacen.
–¿El aborto es definitivamente una cuestión de vida o muerte, sin estadios intermedios?
_Pero claro. Se ha dicho que lo que caracteriza a un ser humano es que es un ser racional, para lo que tiene actividad cerebral y como el embrión todavía no tiene actividad cerebral, tampoco tiene capacidad de razonamiento, entonces todavía no es humano y lo podemos matar. Siendo así me pregunto ¿Está mal liquidar seres humanos? Y… no sé, por ejemplo si estas en una guerra y liquidas gente ¿está bien o está mal? O sea que tampoco hay una respuesta absoluta.
Por otro lado, veamos que si vamos a eliminar electivamente y sin culpa alguna a seres humanos embriones, yo preferiría empezar eliminando a los seres humanos violadores o asesinos que tenemos presos y que si ese es el nuevo criterio aceptado, ocupémonos primero de los delincuentes irrecuperables, que mantenemos en las cárceles con un costo exorbitante, y después del embrioncito. Esto obviamente, lo digo solo para plantear una metáfora.
–Otro argumento es que la mujer debe decidir sobre su propio cuerpo.
_Eso es cierto, pero la realidad es que el embrión no es parte de su cuerpo, pero depende de ella y llevarlo a veces le produce sufrimiento físico, moral y riesgo de vida.
El otro día vi por televisión que una chica de 14 años de un grupo, que había tomado el colegio Carlos Pellegrini (Colegio de la CABA), decía que era para pelear por el derecho de hacerse abortos, y uno de estos periodistas de barricada dice que lo que pasa es que tiene derecho a opinar y a defender sus derechos. A mí me parece que es una banalización de algo muy serio. Probablemente antes de plantear la posibilidad de legalizar el aborto, debiera haberse tomado las medidas necesarias para reducir los motivos de sufrimiento de la mujer que lleva en su vientre un nuevo individuo.
¿Qué es lo que no se hace en nuestro país para reducir el sufrimiento innecesario de las mujeres en condición de embarazo, en especial las de bajos recursos, se legalice o no el aborto?
Primero, crear una red efectiva de contención de la mujer embarazada, para que portar el embarazo no sea un sufrimiento.
Segundo, atención humanizada, sin dolor ni riesgo, y accesible en donde vive la madre, del embarazo y del nacimiento. No haciéndola viajar adonde le resulta cómodo o barato al sistema.
Tercero, tratar al ser humano sin nacer como un bien social muy valioso y demostrarlo aplicando los recursos que necesite, sin especular.
Si hoy esto fuera así, la opción de aborto, legal o no, no sería tan contrapuesta.
Creo que con todas las negaciones acerca de la vida del embrión, lo que están haciendo es tratar de calmar conciencias.