Cyberbullying: agresores amables
Los agresores son amables en persona pero ofensivos en las redes sociales. Utilizan el anonimato para atacar en los medios digitales pero se muestran amigables fuera de ellos. Tienen mayor autoestima y menor tendencia a la depresión que los que difaman en persona. Son algunas de las principales conclusiones de una investigación del Instituto de Ciencias Sociales (INSOD) de la Fundación UADE.
El bullying se define como una agresión intencional, repetida y con un desbalance de poder entre la víctima y el agresor, que en los últimos años acrecentó su visibilidad. Distintos estudios afirman que sufrir de bullying es un importante factor de riesgo para la salud mental con consecuencias extremas como el suicido o las masacres escolares. Un ejemplo trágico sucedió hace 14 años en una escuela polimodal de Carmen de Patagones, cuando un alumno asesinó a tres de sus compañeros e hirió a otros cinco por este motivo.
Un grupo de investigadores entrevistó a 900 adolescentes de ambos sexos para saber si hay diferencias de personalidad entre los agresores adolescentes, que utilizan medios digitales (ciberbullying) y los que consuman sus ataques presencialmente (bullying). El resultado de esta investigación, que comenzó en 2016, fue que los provocadores de cyberbullying tienen mayor autoestima y menor depresión que quienes hacen bullying.
“Los adolescentes que agreden por redes sociales son alumnos en apariencia sociables o agradables, pero que se valen de las ventajas que permiten las nuevas tecnologías, anonimato por ejemplo, para agredir a otros. Estos resultados plantean un gran desafío para docentes y padres a la hora de detectar quiénes hacen cyberbullying”, explicó el doctor Santiago Resett, a cargo de la investigación al portal Argentina Investiga.
El estudio detectó que las consecuencias de sufrir de bullying o cyberbullying son similares: baja autoestima, depresión y ansiedad en las víctimas.