Controversial reunión del Comité de Ordenamiento Territorial
Victoria.- Leonardo Scarparo, presidente de la Comunidad Islera Asociación Civil (CIAC) dialogó con Paralelo 32 luego de fuertes cruces que trascendieron al término de la reunión del Comité de Ordenamiento Territorial del Humedal, donde aseguró que los ambientalistas que intervienen en el tratamiento de los temarios de esta mesa le negaban la participación, e incluso debió exhibir una documentación donde anteriormente lo invitaban a formar parte como asesor, firmada por uno de los que ahora intentaban impedirle el ingreso.
Dentro de los participantes identificados con el ambientalismo estaba una integrante de Wetlands International LAC, Fundación Humedales (Nadia Boscarol); la ingeniera agrónoma Paula Vicari, quien ahora estaría contratada por la fundación internacional con injerencia en el tema, hecho que la encuentra adoptando una posición muy distante sobre el asunto de la que promulgó cuando estaba al frente de Producción y Medio Ambiente local; y otra figura también conocida por esta gestión municipal como es María Emilia Forlese, concejal que asumió ese rol desde el oficialismo luego de participar como referente del área Juventud en la primera intendencia de Domingo Maiocco.
Sumado a estas personas, estaban presentes Alfredo Berduc y Leonardo Caluva, desde las direcciones de Áreas Protegidas y Tierras fiscales de Entre Ríos, que no objetaron la presencia del presidente de la Comunidad Islera (C.I.A.V.), que como su nombre lo indica, se trata de productores que viven y trabajan en el humedal, que además han pasado a formar parte de FARER como miembros activos de la federación de asociaciones rurales entrerrianas.
Otra figura que se sentó a la mesa de esa reunión fue Brenda Muñoz, secretaria de la Delegación de Islas. Muñoz supo tener una relación laboral con Vicari durante su labor como funcionaria, y junto a Forlese hoy tienen una postura ambiental con mínima participación de la producción ganadera, advirtió Scarparo.
El intendente Maiocco parece haber quedado en medio de una disputa ideológica donde anteriores y actuales figuras de su gobierno, y a quienes apoyó políticamente, hoy no solamente han cambiado su mirada conceptual de estos temas, sino que atentan contra la proliferación de una actividad productiva que el jefe comunal conoce de cerca.
Scarparo por su parte, insistió en que fue invitado por Maiocco, “quien mediante una resolución nos había nombrado asesores permanentes del Comité; sin embargo cuando llegamos parte de esa mesa no nos quería recibir en la reunión. A fuerza de mostrar la resolución y presionar, nos quedamos. Fue allí donde observamos una forma de trabajo que dista de lo que se venía dialogando respecto a algunos conceptos. Fundamentalmente lo que no quieren es que intervengamos en la cocina de las resoluciones que quieren sacar, hablando por ejemplo de carga animal, o de derecho sobre el terreno. Hay varios puntos álgidos, por los que realizarán una reunión virtual, donde no creo que seamos invitados. En la próxima reunión ordinaria intentaremos asistir, pero es una cuestión que la determinará el Intendente Maiocco”.
— Cuando usted dice ‘no quieren que estemos presentes’ ¿a quién/es puntualmente se refiere?
— “Hay una concejal: Forlese, que estuvo a la cabeza de impedirnos el ingreso, que casualmente es una de las que firma esa acta donde se nos invita a participar como asesores. Se ve que después se arrepintió. Ella, al igual que Vicari, Muñoz y Boscarol estaban por la negativa de nuestra intervención. Es más, la secretaria de la Delegación de Islas nos envió un mail citándonos a las 13:00 cuando teníamos que estar a las 9:00 para poder participar de esta reunión según lo acordado con el Intendente”.
El presidente del CIAC añadió que el uso y aprovechamiento del humedal no es una cuestión menor, “y se está intentando manejar de manera confusa, porque en determinado momento planteé que hay zonas continentales de Victoria que podrían ser consideradas humedales en la letra escrita, a lo que me respondieron que en el decreto reglamentario hay un gráfico que no las considera. Pero, si la letra dice una cosa y el gráfico, a mí me lleva a la confusión. Las interpretaciones de las personas que están de paso o momentáneamente son justamente personales; cuando algo queda escrito, trasciende esa posibilidad”.
Más adelante Scarparo reafirmó que no se fue conforme, “a pesar que nos escucharon, pero con las actitudes evidenciadas, me lleva a pensar que prefieren evitar nuestra presencia y aportes”.
— ¿Cuáles son los riesgos que ves a mediano y largo plazo si se continúa en este sentido?
— “Los riesgos son muchos, hay una posición ideológica en contra de la producción; en contra de la propiedad privada, por ejemplo en la proposición de permitir la libre circulación de personas y embarcaciones por las costas de las islas y cursos de agua de los humedales, cuando sabemos que hay cursos de agua que no llevan a ningún lugar, sino al seno mismo de ese lote. Pero el problema más importante es que no definen qué es un humedal, pueden abarcar tierras que sean continentales, con la consecuente imposición de restricciones en esos ámbitos, más allá de las preexistentes. Por otro lado, este es un modelo a copiar. Estamos hablando de Victoria en este momento, pero si se hace lo mismo en Diamante, u otro lugar de Entre Ríos tomando como antecedente el nuestro, estamos hablando de un precedente que se intenta asegurar como parte de algo más amplio y preocupante productivamente hablando. Esto es como la jurisprudencia, un antecedente de determinada resolución”.
— En lo productivo propiamente, ¿cuál es ese riesgo?
— “Por ejemplo, fijar la Carga Animal en 0,6 animales por hectárea es una barbaridad. Sin saber cuál es la oferta forrajera, y técnicamente tampoco lo pueden explicar. Este es uno de los varios aspectos negativos que se intentan imponer en nombre de la sustentabilidad ambiental; otra cuestión que quieren exigir es que a partir de 20 cabezas se haga un plan de manejo, imaginémonos que cualquier puestero tiene ese número de vacas, no se le puede pedir eso a alguien que es evidente no causa ningún problema ni está en condiciones de afrontar tal exigencia; además, un plan de manejo ¿en función de qué?”.