Política
Avanza el plan de emergencia vial con la compra de 380 toneladas de mezcla asfáltica
El gobierno de Entre Ríos ha dado un paso significativo en su compromiso de reparar el 100% de las rutas provinciales con la compra de 380 toneladas de mezcla asfáltica en frío. Esta adquisición, realizada en el marco de la Ley de Emergencia Vial, se destinará a las tareas de bacheo en las rutas más deterioradas de la provincia. La Ley, que fue aprobada por unanimidad en ambas cámaras legislativas, busca agilizar y optimizar el estado de las rutas entrerrianas para garantizar mayor seguridad vial.
La mezcla asfáltica será recibida por la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) en su centro logístico en Villaguay y, desde allí, se distribuirá a las 20 zonales de la provincia. Con personal y maquinaria propia, estas zonales comenzarán en los próximos días las tareas de bacheo en diversos puntos críticos de la red vial provincial.
Prioridad en la gestión de Rogelio Frigerio
El gobernador Rogelio Frigerio ha definido el estado de las rutas como uno de los puntos prioritarios de su gestión. Su administración se ha propuesto reactivar la obra pública en la provincia y fortalecer la DPV como actor clave en la recuperación y mantenimiento de la infraestructura vial.
Desde el inicio de su mandato, Frigerio ha impulsado la recuperación de 50 máquinas viales que se encontraban sin uso, reactivado cuadrillas de trabajadores y lanzado un ambicioso Programa de Recuperación Vial. Este plan abarca cerca del 90% de las rutas provinciales y está estructurado en cuatro grupos de obras, con el objetivo de cubrir todas las zonas estratégicas de Entre Ríos.
Hacia una red vial segura y eficiente
La reciente compra de las 380 toneladas de mezcla asfáltica en frío es solo el primer paso de un programa que apunta a bachear y mejorar todas las rutas provinciales en condiciones críticas. Además, la Ley de Emergencia Vial permitirá la ejecución rápida de estas obras, priorizando las rutas con mayor circulación y riesgo. Esta medida busca no solo mejorar el estado de los caminos, sino también reducir los riesgos de accidentes y facilitar el tránsito tanto para particulares como para el transporte de cargas.