Ambiente reitera la vigencia de normativas para el uso de balnearios y playas en la provincia

Con la llegada de la próxima temporada de verano, la Secretaría de Ambiente de la provincia recordó a los municipios costeros la importancia de cumplir con la normativa vigente para la habilitación y uso de balnearios y playas. A través de la resolución Nº 084/07, se establece la obligación de realizar evaluaciones de la calidad del agua en cada playa o balneario que esté habilitado por las Municipalidades, como parte de las acciones del programa provincial de Calidad de Agua.

Control de calidad del agua y normativa vigente

Esta medida responde a lo dispuesto en la Ley Nº 9172/98, que regula el uso y aprovechamiento de recursos naturales, específicamente las aguas subterráneas y superficiales. Según el artículo 33º de esta ley, el uso de playas públicas con fines turísticos, terapéuticos y recreativos debe cumplir con ciertos controles que garanticen la aptitud del agua para el baño, ya sea en inmersiones totales o parciales.

El control de la calidad del agua es fundamental para proteger la salud de la población que frecuenta estas zonas y asegurar un uso seguro y sostenible de los espacios costeros con fines recreativos y turísticos.

Calendario de vigilancia y responsabilidad municipal

En este contexto, cada municipio tiene la responsabilidad de elaborar un calendario de vigilancia de la calidad del agua, conforme al artículo 6º de la resolución Nº 084/07. Este calendario incluye la toma de al menos cinco muestras de agua por mes, con una frecuencia mínima de cada seis días, durante toda la temporada de baño. Las muestras deben ser enviadas a la Secretaría de Ambiente, junto con la nómina de los responsables del proceso de muestreo y análisis.

Este procedimiento busca asegurar que las playas y balnearios de la provincia cumplan con los estándares de calidad necesarios, previniendo riesgos para la salud de los bañistas y fomentando un turismo responsable.

Compromiso con la seguridad y el turismo

La Secretaría de Ambiente insiste en que este tipo de controles no solo son esenciales para proteger la salud de quienes disfrutan de los balnearios, sino también para promover la sostenibilidad de las actividades recreativas y turísticas en la región. El correcto cumplimiento de estas normativas por parte de los municipios permitirá potenciar el atractivo de las zonas costeras, ofreciendo un entorno seguro y adecuado para residentes y turistas.