Amazonas, de selva a sabana
La selva del Amazonas podría estar acercándose a un punto de inflexión crítico que podría hacer que este ecosistema biológicamente rico y diverso se transforme en una sabana de hierba. El destino de la selva tropical es crucial para la salud del planeta, ya que alberga una variedad única de vida animal y vegetal, almacena una enorme cantidad de carbono e influye en gran medida en los patrones climáticos globales.
Los científicos afirman que alrededor de tres cuartas partes de la selva tropical amazónica muestran signos de ‘pérdida de resiliencia’, es decir, una menor capacidad para recuperarse de perturbaciones como sequías, tala e incendios. El estudio se basa en observaciones mes a mes de datos satelitales de los últimos 20 años que han cartografiado la biomasa (la materia orgánica de la zona) y el verdor del bosque para mostrar cómo ha cambiado en respuesta a las fluctuaciones de las condiciones meteorológicas.
Según los autores, la pérdida de resiliencia desde principios de la década de 2000 es una señal de advertencia de un declive irreversible. Por primera vez, el Amazonas genera más dióxido de carbono del que absorbe. Aunque no es posible saber con exactitud cuándo se producirá la transición de la selva a la sabana, una vez que sea evidente será demasiado tarde para detenerla. El estudio descubrió que la pérdida de resiliencia era más extrema en las zonas más cercanas a la actividad humana, así como en las que recibían menos precipitaciones.
“Si se llega a ese punto de inflexión y nos comprometemos a perder la selva amazónica, entonces obtendremos una importante retroacción del cambio climático global», declaró en una rueda de prensa Timothy M. Lenton, director del Instituto de Sistemas Globales de la Universidad de Exeter, Reino Unido y uno de los autores del nuevo estudio publicado en la revista académica Nature Climate Change.