Versiones encontradas sobre una situación resuelta a tiros el sábado
Crespo.- Una situación que se planteó en un quincho ubicado en la periferia de la ciudad, en calle Florentina Gómez Miranda, donde terminaron un vehículo baleado, otro incendiado los neumáticos traseros y una puerta del frente de la edificación perforada por perdigones de plomo, originó variadas versiones y poca información oficial. La pareja del dueño del inmueble donde se produjo el enfrentamiento, habló con Paralelo 32 para desmentir que se tratara de un enfrentamiento entre narcos y se quejó de la policía al afirmar que no respondió a llamados que se realizaron desde el vecindario y su propio marido desde las 2 de la mañana.
Desde la vecindad, donde fueron testigos auditivos de la situación, una persona habló con diario Uno para señalar que “las balaceras no son nuevas en el barrio”, y adjudicó los hechos de violencia se deben a la venta de drogas que hay en la ciudad, para lo cual hay dos bandas que dirimen las diferencias a tiros para ganar el territorio.
“En los datos aportados, mencionaron que entre las 3 y las 8 de la mañana hubo balazos, pero lo más insólito fue la ausencia de la policía. Se llamó varias veces a la comisaría y ningún móvil vino», aseguró la vecina que dialogó con el medio paranaense.
Pocas horas después de publicada la versión, se presentó en Paralelo 32 la señora Grecia Gallardo, para aclarar que “no se trató de un enfrentamiento de bandas narco como dicen algunas publicaciones”.
Explicó luego que su pareja, Facundo Gutiérrez, había organizado un asado en el quincho, que se halla en un predio distinto al de la vivienda familiar. Que a la comida asistió “un señor Héctor Emilio Gómez con Heraldo Matías Kappes, que se tienen pica con mi pareja”. En su relato, que ampliaremos en la edición papel de Paralelo 32, dijo que Kappes amenazó al anfitrión con una botella y saca a las dos personas de adentro y al rato vuelven. “Cuando llega lo apunta con una escopeta calibre 12 en la cabeza, propiedad de Kappes. Entonces mi marido forcejea y el disparo sale por la ventana, que Criminalística determinó que fue el primer disparo, que rompió el vidrio del quincho”.
Según Gallardo, esto sucedió alrededor de las 2 de la madrugada y se extendió durante toda la madrugada del sábado 18. Dice que su marido mismo llamó a la policía, como lo hicieron también vecinos. “Mi marido a las 4 de la mañana llamó y me dijo, voy a salir y voy a la policía –comentó- y salió con el auto todo baleado y de la policía le dijeron que no podían tomarle la denuncia, que se vuelva al quincho y ahí estuvo hasta las 7 de la mañana que fui yo a la comisaría y les pedí por favor, porque hasta las 6 y pico de la mañana volvían a tirar tiros”.
Gallardo dijo que su pareja no tiene armas “sin embargo salió publicado que era una guerra entre bandas narco”.
Dijo que al no haber avances en el procedimiento policial esta mañana se presentaron ante el fiscal Dr. Martín Abraham y agregó que detrás de ellos, cuando regresaron a Crespo, salió un vehículo para realizar los allanamientos que tuvieron lugar uno en calle España en Barrio Azul y el otro camino a Racedo.
Siempre de acuerdo a la versión de Grecia, la pareja de Gutiérrez, el fiscal interviniente habría caratulado la causa como “Intento de homicidio culposo con arma de fuego”.
En diálogo con nuestro medio, la mujer aclaró que: «No es una guerra narco, ¿cómo están diciendo eso, cuando estuvimos todo el fin de semana encerrados en mi casa con miedo porque la policía no actuó, porque mínimamente tendrían que haberlos buscado y tenerlos dentro de la comisaría hasta que pase algo. ¿Qué seguridad, tengo?»
La mujer señaló que fueron ocho disparos en total los que se produjeron en el lugar de los hechos.