Valentín seguirá el resto de sus días con internación domiciliaria
Crespo- Sabina Feresín, mamá de Valentín Vergara, el pequeño internado por una mielitis aguda transversa en el Hospital San Roque de Paraná desde el 21 de septiembre de 2016, hace ya un año y cuatro meses, confirmó a Paralelo 32 que el nene dejó el Hospital San Roque para mudarse a Crespo. El niño se alimenta por una cánula de traqueotomía, requiere del uso de respirador artificial, y durante toda su vida requerirá cuidados especiales.
La vivienda que habitan fue alquilada por el Ministerio de Salud Pública, según el acuerdo homologado ante la jueza de Familia Nº 1 Rosario Moritán el 8 de septiembre pasado. El organismo provincial se encargó además de hacer determinadas refacciones para garantizar las condiciones de salubridad que requiere el menor a fin de abandonar su internación en terapia intensiva y continuar su vida con una internación domiciliaria, acompañada de asistencia permanente de profesionales. El servicio, también contratado por Salud Pública, estará a cargo de Home Care, empresa especializada en el alquiler de equipamiento y atención profesional interdisciplinaria al paciente, en su domicilio, como lo requiere el cuadro irreversible que afecta al pequeño.
La casa está ubicada en calle San Martín, sobre pavimento, acorde a los requerimientos médicos. “El Estado nos presta un aire acondicionado para la habitación, porque él no puede usar ventilador”, y dijo que Valentín “Tiene una cama especial que provee la empresa de salud al igual que un colchón antiescara”- agregó.
Superada la adaptación al respirador artificial portátil que le provee la empresa de salud, Valentín fue habilitado por los profesionales del San Roque al traslado a Crespo para continuar sus días con internación domiciliaria.
“Necesita salir del Hospital para evitar las infecciones intrahospitalarias, que ya tuvo varias porque hay muchos virus que complican su salud. Es un paciente inmunosuprimido, por eso es distinto tenerlo en la casa que en un hospital donde hay mucha cantidad de bacterias y virus por las distintas patologías de los enfermos que llegan”.
Vivienda propia
El contrato de alquiler de la vivienda alquilada por Salud Pública vence el 19 de diciembre de 2019 y antes de este tiempo deberá estar construida la vivienda propia en un terreno que les donó el municipio en junio último con esa finalidad. “Si en un año no edifico me sacan el terreno”- dijo Sabina, sobre las cláusulas impuestas para el uso del predio, confiada en poder avanzar con la obra si se resuelve un problema suscitado con uno de los vecinos del terreno.