“No hay una explicación, ni nosotros nos explicamos cómo pudo haber pasado” indicó Vanesa tras recibir por segunda vez el alta médica por covid-19
Lib. San Martín- Vanesa Coronel de Krapp recibió el alta médica superando por segunda vez el covid-19. En la tarde del jueves 22 de octubre, junto a su esposo Darío, luego de quince días de internación, se retiró por segunda vez del Sanatorio Adventista del Plata.
Quedaron atrás las dos internaciones. La primera vez la propia Vanesa lo informó. “Para los que no saben y leen esto: Di positiva de Covid-19 el viernes 21/8/20. Ya me siento «bien». El lunes 7 de septiembre, luego de los controles de rigor, recibió el alta médica. La segunda y más dura experiencia comenzó el 8 de octubre, hasta la tarde del jueves 22.
Feliz y agradecida
Recobrando fuerzas, ya instalada en su casa, dialogó con Paralelo 32. “Estoy un poco floja todavía, pero gracias a Dios pudimos salir. Esta segunda vez, la verdad, fue una prueba muy difícil para mí y para la familia, fue un cimbronazo muy grande. Es muy difícil explicar lo que se siente, porque tuve sentimientos encontrados al estar internada en terapia junto con mi madre, que todavía sigue allí. Es una situación muy fea en todos los sentidos. No se lo deseo a nadie”, afirmó.
Quebrada en su emoción, agradeció “las oraciones de mi familia y de la comunidad para poder afrontarlo. Dios no me abandonó porque en todo tiempo sentía paz y tranquilidad”, dijo. “Me emociona la calidad y calidez del personal, no se dan una idea el trabajo que hacen los médicos y enfermeros y el apoyo fantástico que recibí de la capellana Soledad”, remarcó.
Respecto al haber dado dos veces positivo al virus, dijo que “No hay una explicación, ni nosotros nos explicamos cómo pudo haber pasado con el cuidado que teníamos en todo. Luego de salir de alta la primera vez, se contagió mi esposo que estuvo tres días con mucha fiebre, luego mi hija Camila y ahí volví a caer otra vez. Caí en cama y no tenía fuerzas para nada, hasta que luego de controles en la guardia, el 8 de octubre decidieron internarme y al final estuve cinco días en terapia en posición prona para mejorar la oxigenación”, recordó Vanesa. “Gracias a Dios estoy bien, me estoy recuperando despacito. Por ahora sigo aislada en casa, con mi familia a la distancia y nos estamos conteniendo con paciencia, porque esto es un proceso largo y lento. Confiando en Dios todo va pasar”, finalizó.