Los emprendimientos familiares se abren espacios en el mercado
Crespo– Poco a poco, tratando de ocupar su tiempo libre, matar el aburrimiento y generar sus propios recursos cuando inició la cuarentena, Agustina Boretto (25) y su hermano Francisco (26), decidieron incursionar en el mundo de los chocolates artesanales. Para entonces, ambos habían terminado de cursar sus carreras universitarias. Agustina se aprestaba para rendir las últimas materias y avanzar en la tesis final de su Licenciatura en Psicopedagogía y Francisco esperaba iniciar su residencia en medicina. “Así surgió, a partir de que mis primas que viven en San Vicente (Santa Fe) desde hacía un año estaban en el tema, que tiré la idea –dice Agustina a Paralelo 32– y mi hermano se sumó a ayudarme”.
Como lo marcan estos tiempos, crearon una cuenta en Instagram para promocionar los diferentes productos de la marca ‘Made with Love’ que comparten con sus primas y empezaron a investigar los secretos que rodean el mundo del chocolate artesanal. “Son chocolates que se derriten y se producen con moldes, de diferentes formas y con distintos rellenos” -comenta Agustina.
Paletas, tabletas, corazones gigantes rellenos, donas, nueces y pasas de uvas bañadas en chocolate, son los productos más clásicos; todos con un toque creativo.
“Empezamos probando las marcas y nos terminamos quedando con una que es la que más nos gustó y a nuestros clientes también. La trae un proveedor de Paraná”-detalla.
El emprendimiento surgió con la ayuda de sus padres. “Nos dieron una mano para comprar los primeros chocolates, los primeros moldes. Una vez que tuvimos los moldes básicos de barras, donas, donitas y las formas más comunes, empezamos a expandirnos y comprar más cosas”.
El gran salto lo dieron con las promociones para el Día del Padre. Sus chocolates artesanales rellenos de dulce de leche, nutela, pasta de maní, de banana, de menta, con rocklets o chips de chocolate blanco y negro, hicieron furor entre la clientela.
“Bajamos un poco el rendimiento –explica la emprendedora- porque mi hermano empezó a cursar su residencia de medicina y quedé sola a cargo”. Sin embargo, no deja de introducir novedades y ofrecer nuevas oportunidades de disfrutar de un buen chocolate. “Implementamos la torta piñata, es muy novedoso y está saliendo mucho. Tiene la forma de una torta, todo hecho en chocolate, vacía adentro, está decorada y quien la encarga dice qué colocarle en su interior. Hay personas que han puesto celulares, golosinas, nuestros productos y otros regalos para quien va dirigida la torta. Es un obsequio muy original y sale muchísimo en esta época; hay gente que no le gusta la torta tradicional, a veces se corta y queda, ésta en cambio es todo chocolate y se come entera”.
Agustina cuenta que “cada vez van surgiendo más ideas. Ahora –agrega- estamos armando promociones para el día de la madre, combos con diferentes precios, de paletas rellenas, corazones rellenos, pasas de uvas y maní bañado en chocolate, dispuestos en cajas de Feliz Día Ma’, para dar distintas opciones. Además nos estamos preparando participar con los chocolates y postres individuales como chocotortas y cheesecake de un emprendimiento nuevo, un almacén colaborativo próximo a abrir. Así, el fascinante chocolate toma múltiples formas y combinaciones para crear piezas originales en diseño y sabor, con los que la emprendedora satisface mediante su propia línea de chocolates artesanales, los pedidos de sus clientes.