El frigorífico River Fish comenzó a producir pacú en Victoria
Victoria.- Autoridades del Ministerio de la Producción de la provincia estuvieron visitando el Frigorífico River Fish (Av. Eva Perón), donde se está llevando a cabo un ambicioso emprendimiento que contempla la cría de pacú en esta ciudad.
El Director de Recursos Naturales de la provincia, Mariano Farall, explicó que la decisión política del gobierno se centra en apoyar el desarrollo estratégico de la actividad acuícola en suelo entrerriano, esencialmente lograr la regularización y la puesta en valor de las estaciones de investigación. Actualmente son tres, una en La Paz que surge en el marco de un convenio entre la cartera de la Producción y la Municipalidad de la mencionada ciudad, que tiene como especie en desarrollo el pacú. En Concordia el Centro Acuícola El Alambrado, con el respaldo del INTA y la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande, y el tercero en Diamante con el respaldo del municipio y la Nación.
Además de estos centros de experimentación, en Entre Ríos hay alrededor de 20 establecimientos que se dedican a la acuicultura. Algunos producen alevines (*) etapa inicial de desarrollo, similar al que se lleva a cabo en Victoria y otros adquieren estos ejemplares y realizan la recría y el engorde hasta la terminación.
También están los que lo hacen con fines turísticos relacionados a explotaciones rurales que se denominan “Pesque y pague”, permitiendo al visitante practicar el deporte de la pesca en grandes estanques o lagunas y pagando por lo que extrae. “Estos se hace de forma intensiva y no necesita los cuidados del que produce en forma comercial y pueden diversificar las especies”.
En diálogo con Paralelo 32, comentó que en el marco de la Ley de Pesca los convierte en el organismo de aplicación y control, otorgan las habilitaciones para lo cual las explotaciones deben cumplir con determinados requisitos. Se extiende un permiso provisorio por un año que después de sucesivos controles es habilitado. Con las inscripciones en regla, los productores acuícolas pueden acceder a determinados beneficios, entre ellos a los Registros Nacionales exigidos para realizar transportes interjurisdiccionales de las especies. Todos los establecimientos deben estar habilitados porque existen una serie de requisitos que deben cumplir.
Actualmente los esfuerzos están centrados en la legislatura, porque el objetivo de la cartera es lograr la adhesión a la Ley Nacional de Acuicultura. Actualmente un proyecto fue aprobado en senadores y espera sanción definitiva en diputados. Esta norma permitiría a las explotaciones provinciales acceder a algún tipo de financiación por parte de la Nación, en base a partidas incorporadas al presupuesto. “Es una decisión del Ministro de Agricultura y Ganadería, Luis Basterra -a nivel nacional- de impulsar la acuicultura en todo el país”.
Finalmente explicó Farall que actualmente están abocados a visibilizar a la piscicultura como una alternativa productiva para nuestra provincia, por tal motivo siguen supervisando y habilitando explotaciones. El plan contempla una segunda etapa que consiste en planificar un trabajo en cadena para potenciar la actividad.
Cría de pacú
El responsable técnico del emprendimiento de River Fish es el Lic. Ricardo Rosello (**), quien explicó que el proyecto contempla la cría del pacú y lo primero que hicieron fue construir el laboratorio. Agregó que cuentan con reproductores y el objetivo es producir alevines de esta especie, la segunda etapa, que también llevará a cabo la empresa, es la crianza semi intensiva en piletones, se trata de espacios amplios que deben tener como mínimo 1 metro de profundidad.
En la primera etapa el pacú pesa entre 5 y 10 gramos, el paso siguiente es hacer la recría y posteriormente el engorde. Hay abundante literatura especialmente del INTA que detalla las instalaciones exigidas, técnica de manejo y todo lo relacionado al proceso productivo. Es decir que se terceriza estas últimas etapas y en el caso del el frigorífico local es llevar adelante el proceso completo hasta la terminación, cuando el pez llega a un 1,2 kg. estimativamente. Para ello, los dueños de la planta local tienen un campo en el norte de Santa Fe donde continuarían con las etapas productivas.
Según el profesional, cualquier tipo de agua se adapta, proveniente de pozos, ríos o de lluvia. Aseguró que hay muchos productores rurales en nuestra provincia interesados en desarrollar la acuicultura, esta actividad permite diversificar la explotación, partiendo de la base que es una alternativa que genera ingresos.
Además el pacú prácticamente sigue siendo un habitante del alto Paraná, no se encuentra en nuestros ríos, está vedado para la pesca y desde el punto de vista gastronómico es muy apetecido. “Tienen una demanda importante en todo el país”.
El emprendimiento local que dirige tiene bien desarrollada la etapa de reproducción y hay lotes en los piletones en la etapa de recría, que pudimos observar en visita realizada a las instalaciones. Roselló explicó que están capacitando el personal porque los problemas que se han presentado obedecen a cuestiones de manejo. Estos se fueron corrigiendo desde que está al frente de la dirección técnica.
Proceso productivo
Es importante la alimentación, porque antes se suministraba un alimento balanceado similar al que se consume en avicultura, pero actualmente se utiliza un pellet denominado floating, que permanece en la superficie y el pez lo va ingiriendo diariamente. “Este sistema permite medir lo que consume, si uno administra 20 kilos sabe si se está alimentando, a diferencia del balanceado que se va al fondo y uno no sabe si el pez lo consumió correctamente”. En nuestra provincia aún no hay una fábrica de balanceado de este tipo, por lo que debemos adquirirlo en Santa Fe, Córdoba, Buenos Aires y algunas provincias del norte.
Problemas sanitarios no se han presentado, cuando se produce mortandad en general es atribuible a problemas de manejo. La manipulación de los ejemplares, especialmente en invierno cuando esta especie forma una capa mucosa protectora, es uno de los problemas. Cuando el encargado lo toca con la mano deteriora esta protección y termina formando hongos o lesionando la piel.
La temperatura ambiente también tiene incidencia en esta especie. Para controlar ese factor, especialmente en invierno, el ejemplar tiene que ingresar a los piletones con 200 gramos de peso como mínimo. De esta manera logra soportar las bajas marcar térmicas.
La relación consumo –ganancia de peso, a criterio de Rosello es favorable en la actualidad, se lleva el ejemplar a 1,200 Kg y se expende despinado. En cuanto al valor de mercado, ingresamos a la página de Mercado Libre donde se ofrece este tipo de producto a un precio que oscila entre 700 y 800 pesos el kilo.
De interés para productores
En diálogo con Paralelo 32, nuestro entrevistado explicó que tanto la recría como el engorde no generan lotes parejos, en consecuencia, el productor va extrayendo en la medida que va necesitando vender y elige los de mayor peso.
También comentó que cuando algún productor agropecuario -sector al que apuntan-, decide llevar adelante un emprendimiento, lo asesoran con respecto a todas estas cuestiones. “Tenemos experiencia como para indicar los pasos a seguir, para que el que inicia una producción no cometa errores”. No es negocio gastar dinero sin recupero, señaló.
Por otro lado comentó que la planta frigorífica mencionado trabaja con la pesca extractiva, si logran armar una estructura importante teniendo la cadena de comercialización armada, incorporarían otro producto de valor.
(*) Se entiende por alevinaje el período comprendido entre el nacimiento o eclosión y el momento de alcanzar los 7 centímetros de longitud, la etapa posterior se denomina fingerlig (**) Ricardo Rosello, es Licenciado en Biología Marina, pero hace mucho tiempo que se dedica a especies de río, asesora al Ministerio de la Producción de Santa Fe y actualmente ha incursionado en nuestra provincia de donde es oriundo. Además es Director Técnico del emprendimiento local.