‘Pintaremos Victoria’, la historia de esos que creen en el trabajo como una forma de cambiar la realidad
Pintaremos Victoria, es un proyecto familiar que hace más de un año funciona en la zona puerto de la ciudad, entre las dos plazoletas de juegos infantiles donde sus creadores apostan pizarrones para invitar a los niños a dar rienda suelta a su creatividad por unas pocas monedas.
En ocasiones, la familia es el principal motor para aquel que decide convertirse en emprendedor, y esta energía y el espíritu inquebrantable de salir adelante, puede convertir a las personas más tranquilas en luchadores incansables.
Así comienza esta historia, con una familia de Villa Constitución (Provincia de Santa Fe) que, como tantas, atravesaba un complicado momento en el que decidió dejar todo para emprender nuevos rumbos. Así llegaron a Victoria donde se pusieron a trabajar con creatividad y dedicación.
David López trabajaba en una empresa metalúrgica de la provincia de Santa Fe (Acindar) y a cambio de estar más cerca de la familia, aceptó el dinero de un retiro voluntario. Este fue el aliciente para decidir girar el timón y emprender rumbo a esta ciudad junto a su mujer Gladis Noemí Zanzo, dos hijos varones de 23 y 25 años, y dos hijas mujeres de 11 y 26 años —la cual también tiene dos hijos chicos. Dos de los mayores se volvieron al tiempo, por haber logrado una oportunidad de trabajo, pero los 7 restantes no claudicaron en la empresa de afianzar un nuevo destino a sus vidas. En Villa Constitución vive otra hija de la pareja, que con 36 años no fue parte de esta arriesgada aventura.
“En Victoria no conocíamos a nadie, solamente a la personas que nos alquilaba cuando veníamos a pasear algunos días. Él fue quién me tiró la idea de comprar un camión atmosférico (Desagotadora Victoria) para poder trabajar acá, si fuera por mí, me ponía un lubricentro y lavadero de autos, cosa que era mi idea desde el principio, pero decidí optar por esta posibilidad que se presentó”, Dijo López a Paralelo 32.
Gladis tampoco se quedó atrás con su emprendimiento, buscó como ayudar y generar un poco de dinero para colaborar en su casa, ya que desde que llegaron a Victoria, empezaron a alquilar.
Así surgió Pintaremos Victoria que con habilitación Municipal en mano, se fue transformando en una opción para los visitantes y familias locales que vienen al parque y la zona costera a distenderse.
En esta apuesta trabajan tanto Gladis como sus hijas, la idea se replica cada fin de semana y días feriados en que llevan sus pizarrones, pinturas y hojas dibujadas, para que los chicos se acerquen a pintar sus héroes y dibujos que más les gusten en uno de los lugares más hermosos de la ciudad, cerca del río, y del parque de juegos que se levanta a metros de allí.
“Una idea que se hace en San Nicolás, la traje a Victoria, les damos todos los elementos a los niños que quieran pintar y que ellos se explayen como quieran, a veces les saco una foto, cuando tengo el permiso del padre o la mamá, para subirlo a la página de Facebook (Pintaremos Victoria, de donde extrajimos la que compartimos en esta nota – N. de R.) “, es algo muy lindo ver que los chicos se sienten y estén horas para hacer un dibujo, yo no soy profesora, pero me gusta verlos que ellos hagan sus dibujos, los firmen o garabateen y se los lleven”, concluyó Zanzo, entusiasmada más por la respuesta en el rostro de los niños que por lo que logra reunir monetariamente. “En el parque también están el pochoclero, el que hace globos, calesita, pelotero, etc. todos muy buena gente, que hacen un esfuerzo más para llevar dinero a sus casas”.
Una historia más de aquellos que decidieron cruzar de orilla en busca de un futuro distinto, valorando aquello de tranquilo y pintoresco que apreciaron cuando visitaban la ciudad ocasionalmente; para intentarlo, apostaron al trabajo y desde allí con mucho ingenio y tesón contribuyen al sostén de los suyos.