Aranguren quiere aumentar el precio del GNC a un valor similar al de la nafta
El ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren, habló en un almuerzo con empresarios y economistas organizado por la Fundación Mediterránea en la ciudad de Buenos Aires, donde en un espacio de preguntas el secretario de la Cámara de Empresarios de Combustibles, Raúl Castellanos, le planteó la preocupación del sector por el «desplome» que viene sufriendo la conversión de vehículos nafteros a GNC, al achicarse la brecha de precios entre el gas y el resto de los combustibles; teniendo en cuenta que en los últimos doce meses el precio de la nafta aumentó el 40%, mientras que el del GNC subió el 90%.
Ante empresarios del sector de gas natural comprimido (GNC) -llamado popularmente el «combustible de los pobres»- el ministro ex CEO de Shell Argentina respondió que «El GNC tiene que costar un precio similar al de la nafta; a igual poder calórico, precio similar». Argumentó que la Argentina no se autoabastece de gas, que importa el 30% de lo que consume y que no tiene lógica «importar gas para que anden los autos».
En la Argentina hay 1.75 millones de autos con equipos de GNC y 1.900 estaciones de servicio que venden el combustible. Instalar un equipo cuesta, en promedio, 20.000 pesos, «La diferencia de precios con las naftas justificaba ese gasto y, además, resignar autonomía y espacio en el baúl, pero el achicamiento de la brecha cambió la ecuación» dijo el secretario de la Cámara de Empresarios de Combustibles.
En lo que va del año, la conversión de nafteros a gas cayó un 45% respecto a 2016, y es una estadística que no parece posible de revertir, con la nueva suba del gas prevista para octubre el metro cúbico pasará a costar alrededor del 70% del precio del litro de nafta, una diferencia que será un punto de inflexión y el comienzo del final del sector.
Cabe agregar que la política de subsidios al GNC es una de las más antiguas de la democracia, ya que comenzó en los 80′ durante el gobierno de Raíl Alfonsin, en el marco de un plan de sustitución de combustibles líquidos. Si efectivamente el gobierno nacional avanza con sus proyectos de quita de subsidios y aumento del precio del metro cúbico, comenzaremos a ser testigos del fin del GNC en nuestro país.